Get in the ring «Nirvana+GN'R»

Capítulo 48

—Lamento no tener nada preparado, es que la idea de que te quedes aquí surgió de repente.—habló Kurt mirando a Axl, mientras este acarreaba su bolso hasta la habitación del rubio.—Pero mientras puedes dormir aquí.

—¿En tu cama?—preguntó el pelirrojo sorprendido y Kurt asintió.

—Si, yo mientras tanto dormiré en el sofá.

—No, no puedes.—negó el pelirrojo dejando su bolso a un lado.—Esta es tu cama, a mi no me molesta dormir en...

—Dije que no, idiota. Tú duermes aquí y punto.

—Bien.—Axl finalmente aceptó, de mala gana.—Pero sólo unos días.

—Si, cómo digas.—el rubio le restó importancia.

Kurt se recostó sobre su cama, apoyado sobre el respaldo de esta, mientras observaba atentamente al pelirrojo acomodar su ropa.

Lo que llamó su atención de inmediato fue la gorra que Axl tenía con el logo de Nirvana, la que había comprado en ese desastrosa noche en el recital para pasar desapercibido, pero no había funcionado como él esperaba. Las palabras de aquél joven aún causaban molestias en Axl. Kurt tomó la gorra y la observó, para luego largar una risa.

—¿Por qué gastaste dinero en esto? Que desperdicio.

—Pues porque necesitaba ir de incógnito a verte.—respondió Axl, arrebatándosela de las manos y volviendo a guardar la gorra en su bolso.

—Podrías haberte puesto unas gafas como Superman y listo.—bromeó Kurt.

—Ja-Ja, que gracioso eres.—se burló el pelirrojo.

—Soy muy gracioso, idiota.

—Claro.

—Y aún me sorprende que hayas ido ese día a verme, nunca me dijiste por qué, Axl.

—Es que me gusta tu música, eso es todo.—respondió agachando su cabeza, intentando ocultar el rubor de sus mejillas.

—Te gusta mi banda, ¿no es así?

—Así es.

—Bien, tal vez podrías ser parte de ella...—el rubio se llevó una mano a su mentón y pensó unos segundos:—Ya sé, podrías ser corista.

—¿Corista?—preguntó Axl incrédulo, arqueando ambas cejas.

—Así es.

—No sé si pasaré desapercibido allí en el fondo, mucho menos cuando escuchen mi voz.—replicó el pelirrojo, riendo.

—Podrías pasar desapercibido si no cantaras en ropa interior como haces siempre, idiota.

—Me gusta cantar de esa forma.

—Pero llamas mucho la atención, tonto.—Kurt rió.—A todos se les cae la baba cuando te ven.

—No creo que a todos.—susurró el pelirrojo, lo suficientemente alto para que Kurt lo escuche.

—Créeme, a todos se les cae la baba.

Se quedaron en silencio unos minutos, mientras Axl seguía acomodando sus cosas. Kurt sólo lo observaba, cada movimiento que el pelirrojo hacia él lo seguía con sus ojos azules, procurando que Axl no se diera cuenta.

En Kurt comenzaba a surgir una extraña sensación dentro de él, no sabía lo que era, pero si sabía que era a causa de Axl, y a medida que lo conocía, que hablaba con él, sentía cariño por aquél pelirrojo. Tal vez era sólo una amistad, al menos por ahora, pero las cosas comenzaban a ir por otro camino del que no había retorno, porque cuando Axl se enamoraba daba todo en la relación, todo el amor se lo daba a aquella persona especial hasta que su corazón fuera roto, y fue roto demasiadas veces, pero Kurt no se enamoró jamás, y mucho menos iba a creer que ese pelirrojo al que tanto odiaba podía ser su primer amor.

—¿Por qué no usas la gorra de Nirvana ahora?—Kurt rompió el silencio.

—La última vez que la usé me trajo problemas.—respondió el pelirrojo sin mirarlo, concentrado en sus prendas.

—¿Qué clase de pro...? Ah, ¿aquél chico, verdad?—Axl asintió.—Ese día no alcanzaste a contarme lo que sucedió, ¿recuerdas que llegaron Dave y Krist?

—Si, pero no quiero hablar sobre eso, Kurt.

—¿Por qué no?

—Es que ese imbécil dijo muchas estupideces y no quiero pensar en ello, ¿sabes?—el pelirrojo agachó su mirada, intentando no cruzarse con los ojos azules de Kurt que lo observaban atentamente.

—¿Por qué no quieres contarme, Axl? Yo podría ayudarte, puedo ayudarte si tú tienes confianza en mí, ya te lo he dicho.—Kurt se levantó de la cama y caminó hasta el otro lado para quedar frente a Axl. Apoyó ambas manos sobre sus hombros y lo acercó más a él.—Puedes decirme lo que sea, Axl. Dime lo que sea que te haga sentir mejor. Quítate todo el peso de encima y sé libre de hablar y contar la verdad por una vez.

—No es que no quiera confiar en ti, Kurt, es que me da miedo contarlo...—Axl levantó su vista hacia el rubio  y sus ojos verdes estaban cristalizados.

—¿Miedo a qué, Axl? ¿Tienes miedo de que te juzgue de nuevo?—el pelirrojo asintió.—Todo lo que pensaba sobre ti fue un error, ya te lo he dicho, y me arrepiento cada segundo de haber sido una mierda contigo. Ahora ya te conozco, Axl, y sé que eres incluso mejor persona de lo que soy yo.  Cuéntame, por favor.

—No es lo que el chico dijo lo que me molesta, Kurt, porque sé que todo lo que él dice es una mentira...—soltó. Se apartó del rubio y se sentó sobre la cama, mientras contenía el llanto, un llanto lleno de rabia y enojo por ser atacado permanentemente, y ser acusado de algo que no era.—Es cómo lo dice. Aquél chico me miró a los ojos y me dijo que arda en el infierno, Kurt.—una lágrima rodó por el rostro del pelirrojo y se la limpió rápidamente.—Y que soy un asco.

—Pero tú sabes que...—Axl lo interrumpió.

— Pero ese chico tiene razón, sólo que no sabe que yo siento asco de mi mismo y que ardo en un infierno todos los malditos días de mi vida. Ese es mi destino.

—Tal vez nuestro destino es arder juntos en el infierno, o aprender a salir juntos de él.

voten y comenten si les gustó

dije que la historia estaba llegando a su fin y que ahora los capítulos iban a ser más largos, pero ahora los estoy acortando para que tengan get in the ring para rato✨

en el otro capítulo no le dieron pelota a dave y a taylor, pobres mis papás 💔