Get in the ring «Nirvana+GN'R»

Capítulo 67

Por fin Axl había logrado escaparse de Kurt, por lo que rápidamente se vino al ensayo de la banda con la intención de no retrasarse y que nuevamente las discusiones entre todos comenzaran. Ahora no podía dar ni un paso en falso si quería que Guns N' Roses triunfara.

Pero en parte le dolía tener que abandonar a su rubio tan especial, le dolía por el simple hecho de que ocultaba sus verdaderas intenciones con una mentira, la cuál tarde o temprano saldría a la luz, lastimando a Kurt y alejándolo de él, tal vez para siempre.

Y al llegar al estudio, se encontró con todos sus compañeros en este junto a su representante, y por la expresión alegre que tenían todos en sus rostros, se imaginaba que se traían algo grande entre manos.

—¿Qué sucede aquí?—preguntó intrigado acercándose al grupo y cruzando ambos brazos sobre su pecho.

—Llegaste justo a tiempo, amigo.—contestó Duff sonriente.—Hay muy buenas noticias.

—¿Cuáles?—preguntó el pelirrojo con unos notables nervios en su voz.

—Estoy arreglando los últimos detalles para que Guns N' Roses comience una gira mundial.—explicó el representante con una sonrisa de oreja a oreja al igual que los compañeros de Axl, pero al oír esto, pareció que el mundo del pelirrojo se vino abajo.—Estoy invirtiendo mucho dinero en publicidad, pero cuando las entradas salgan a la venta voy a recuperarlo todo, ¡ganaremos millones!

—Pero...—Axl no podía formular ni una oración por la sorpresa y la preocupación que sentía.—¿Tan pronto? Apenas hemos ensayado y...

—Nosotros no necesitamos ensayar, idiota.—soltó Slash, observando al cantante.—Somos increíbles.

Y la respiración de Axl se aceleraba a cada vez más al pensar en su amado rubio, quién le había dado una mano cuando no tenía a nadie más. ¿Realmente iba a ser capaz de abandonarlo para irse de gira con la banda a la que prometió jamás volver?

Sentía como su corazón se hacia trizas al imaginar el dolor que Kurt sentiría, porque le había fallado al volver al lado de Slash, ignorando todo el sufrimiento que este le había causado, y ahora saldría de gira junto a él por quién sabe cuántos meses.

Y ahí es cuando se le venía a la mente un sólo pensamiento: <<Kurt no se merece a una basura como yo>>.

—¿Estás bien, Axl?—preguntó Duff pasando su mano frente al rostro del mencionado, intentando sacarlo de su trance, y el cantante asintió torpemente.

—Si, es sólo que me duele un poco la cabeza, es todo.—mintió.—Saldré a tomar un poco de aire fresco.

—¿Quieres que te acompañe?—preguntó ahora Slash tomando a Axl por su brazo.

—No, está bien, iré solo.

Axl se apresuró en caminar hacia la salida, bajo la atenta y sospechosa mirada de sus compañeros, para después salir a la calle y tomar aire.

Su corazón parecía a punto de saltar de su pecho, y le dolía pensar en Kurt.

En este preciso momento se arrepintió de haber aceptado la propuesta de Slash, de volver a esta maldita banda que tanto había arruinado su vida y fallarle a la única persona que le trajo felicidad en su peor momento.

Axl estaba seguro de que todos los problemas se le vendrían encima, pues pronto iban a aparecer imágenes y anuncios de la gira de Guns N' Roses por doquier, y el rubio no tenía idea alguna de que su pareja volvió a formar parte de esa banda.