Capítulo 20

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Slash y Axl estaban pasando más timpo juntos de lo normal con la excusa de buscar un nuevo baterista, pero no era incómodo, al contrario, parecía que la amistad entre ellos era igual que antes. El guitarrista ya no tiraba sus comentarios llenos de resentimiento hacía el pelirrojo, pero el que lo conocía bien podía notar que en el fondo le seguía doliendo el haber sido rechazado.

—Ya estoy cansado, creo que mejor me iré.—soltó Axl en un bostezo, levantándose de su silla. Llevaban todo el día escuchando discos, mirando vídeos de diferentes bateristas y hablando por teléfono con diferentes personas, pero a pesar del duro trabajo no conseguían a nadie que quisiera tocar para ellos.

Bien. Mañana seguimos si quieres.replicó Slash dedicándole una pequeña sonrisa.

Será difícil llenar el lugar de Steven.dijo Axl en un suspiro, sacando un cigarro de su bolsillo y encendiéndolo. El guitarrista lo observaba triste, porque lamentaba que uno de sus mejores amigos ya no éste en la banda después de todo.

Yo no me despedí de él, ¿sabes?habló luego de unos segundos, mientras miraba un punto fijo en el suelo.Estaba tan enojado con él por lo que hizo que ni siquiera me despedí.

Estoy seguro de que Steven lo sabe.Axl apoyó una mano en el hombro de su amigo y le sonrió con dulzura. Slash levantó su vista hacia él, para apreciar mejor sus facciones, sobre todo sus labios que deseaba besar más que nunca.

Será mejor si nos vamos a casa.respondió el morocho rompiendo el silencio.

*****

Kurt abrió la puerta de su casa evitando causar el menor ruido posible. Ya era tarde y no sabía si Courtney estaría dormida o no.

A los pocos minutos de que la rubia y él hablaron por teléfono, Kurt comenzó a empacar su ropa de nuevo para volver con ella. Cualquiera en su situación hubiera hecho lo mismo que él, porque a pesar de que esa mujer no fuera perfecta, tenía a su hijo en su vientre. Aquél bebé iba a ser la razón por la cuál Kurt volvería a casa con Courtney.

En el corazón del ojiazul eran confusos sus sentimientos. Por un lado amaba a Courtney, aquella mujer era la persona más interesante que él había conocido. Lo hacía sentir más vivo que nunca. Pero por el otro lado, ella lo hundía más y más en un pozo de drogas del que tarde o temprano no podrían salir. Además ella se ponía en riesgo así misma, como a su hijo.

Kurt deseaba tener una familia para dar y recibir el amor que nunca tuvo en su vida, y aunque no creía que Courtney fuera la más indicada, él ahora estaba feliz, porque su mayor sueño comenzaba a ser realidad.

El rubio subió las escaleras hasta la habitación, y cuando abrió la puerta se encontró a Courtney, dormida en la cama con la ropa puesta en vez del pijama. Dejó la mochila con su ropa y su guitarra en el suelo, y se acercó a la cama. El rubio se recostó al lado de su pareja y la abrazó por la cinturan, justo cuando ella abrió los ojos.

Volviste.susurró con una sonrisa en su rostro.

Volví por ustedes.respondió Kurt, devolviendo la sonrisa y acariciando el vientre de su esposa.

*****

¿Me prometes que no te irás ahora?preguntó Courtney preocupada, dándole un sorbo a su café.

Lo prometo.afirmó el rubio al levantarse de la mesa. Se acercó a Courtney y posó ambas manos en sus mejillas, luego acercó su rostro al de él para dejar un dulce beso en sus labios que ella correspondió. Al quedarse sin aire se separaron y Kurt acarició la mejilla de la rubia con su pulgar.Haremos que esto funcione.

Si, Kurt...la interrumpió.

Pero debes prometerme que dejarás las drogas atrás.

Te juro que...

Sino todo se acabó.habló más serio de lo usual y Courtney asintió tontamente, con sus ojos llenos de lágrimas.

Prometo que voy a dejar todo, en serio.la rubia enredó sus brazos en la cintura de Kurt y lo abrazó fuertemente.Te amo.

Él no respondió.

*****

Courtney se había ido a tomar una ducha, mientras el rubio ordenaba toda su ropa otra vez. Ahora parecía ser que definitivamente las cosas iban a ir viento en popa, o al menos eso esperaba.

Doblaba una remera y tarareaba una canción de The Beatles cuando oyó un grito de horror de Courtney provenir desde el baño. Kurt salió de su habitación rápidamente y fue corriendo hasta allí. Al abrir la puerta se encontró con la cortina de la ducha abierta de par en par, Courtney desnuda apoyada contra la pared llorando y por su entrepierna no paraba de caer sangre, dejando un gran charco en el suelo.

Las cosas no marchaban bien.

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voy a llorar con lo que yo misma escribo

(((igual a partir de acá ya empieza la emoción)))

Get in the ring «Nirvana+GN'R»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora