Tolerancia cero.
Es lo que le faltaba a sus predecesores, Batman lo sabe, mientras vigila la ciudad sombrío y letal, puede adivinar a lo lejos a Superman, haciendo lo suyo... ese es el mejor camino que ellos pueden tomar, los verdaderos héroes deben ser capaces de entender...
Para crear un mejor futuro, un mundo adecuado, algo que valga la pena... es necesario liberarse de las plagas primero.
Cierra los ojos un segundo y escucha el viento pasar a su lado, un aire cálido antes de volverse a verle... Kon siempre ha sido capaz de escuchar sus pensamientos por lejos que este, porque los latidos del corazón de Timothy Drake es algo que Conner nunca ha dejado de vigilar jamás.
Se miran a los ojos sin necesidad de decir nada más, ambos tomaron las decisiones que los llevaron a lo que son ahora, pero sus razones fueron buenas y eso nadie puede cambiarlo.
Nadie.
Se refleja, con la máscara cubriéndole la cara, en los ojos del clon, ese mismo que nunca ha dejado de estar a su lado... en los ojos de su amante y se pregunta que ve, lo hace un solo segundo antes de apartar el pensamiento.
Conner siempre lo ve a él, claro, y él ve a Conner, con o sin traje de superhéroe... las cosas son claras, es él... son los mismos que hace años.
Haciendo lo correcto.
Puede notarlo volando a su lado, mirando la oscuridad de esa ciudad sin nombre, y no hay palabras para decir nada más... sobre su hombro siente la presión de su mano, la misma mano amiga de antes, la misma mano amada de hace años...
Son los mismos.
Siguen buscando lo de siempre.
Y siguen juntos.
Seguirán juntos.
Nada ha cambiado.
