La escarcha se sostenía de las mejillas de Oliver Queen, los dientes castañeaban por el frio invernal.
Damián preaionaba loa ultimos rastros de su existencia contra sus blancas mejillas.
Doce horas atrás Lois Lane había muerto en parto, y Bruce Wayne había sido detenido hará cuatro cuando trataba de asesinar a Jonathan Kent, recién nacido.
Las aguas habían envenenado al pueblo y a Bruce Wayne. Pero aún no completaba sus anhelos.
Damian no había odiado a su padre, su única razón para quedarse había sido la traición del ser al que amaba.
Oliver lo había besado al borde de aquel arroyo y el aun adolescente había tratado de resistirse, pero poca fuerza le había quedado cuando cayendo contra el suelo, habia sentido bajo las aguas como la vida se le acababa.
El arroyo no era profundo, pero una cabeza podía hundirse.
Él era fuerte. Pero poco puede hacerse cuando un cuerpo más grande se pone encima y manos gruesas impiden al aire llegar a tus pulmones.
No había podido luchar.
Y cuando el agua llego a sus pulmones... Había sido una forma horrible de morir.
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En las aguas se habia difuminado su conciencia deshaciendose de esa forms de sentir que tenía... Tan apasionada.
El beso frío murio contra los labios de Queen, quien sin saberlo se inclinaba cada vez más contra el agua.
Sus amores habían tenido un precio terrible.
La muerte acariciaria sus cuerpos apasionada y sin medida.
Damian se había quedado por Oliver... Pero ya era hora de irse.
Había concedido a Oliver la venganza sabiendo que este volvería una y otra vez con él.
Y allí estaban.
El invierno era crudo.
El mas crudo en años.
El ultimo de los Queen moriría en los bordes del arroyo, hechizado por un anhelo roto y malo.
Cerró los ojos. Muerta su consciencia cuando el otro cuerpo cayo congelado y muerto al borde.
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.Quiza en otra vida.
FIN