Alisson
El azul era un color que resaltaba mis ojos de forma maravillosa, y lo sabía. Eso, y el hecho de que era mi color favorito, eran las razones principales por las que había decidido cubrir mi cuerpo con un largo vestido azul aquella noche. Este se ajustaba en mi pecho, siendo sostenido por mis pequeños senos, y luego caía de forma suelta en una falda simple hasta mis pies.
Estaba de forma sencilla, sin mucho maquillaje y con mis simples bucles naturales, porque desde que había estado con Keith el día de su cumpleaños, había optado por comenzar a ser así. Natural. Él me hacía sentir feliz conmigo misma, y me hacía olvidar de todos los complejos e inseguridades que alguna vez había tenido, los cuales ocultaba intentando que todos me vieran hermosa. Ya no necesitaba que nadie me halagara, porque cuando sus ojos me dedicaban una mirada como si fuera perfecta, me sentía de esa forma.
Me encontraba en el baile de invierno, y a pesar de haber creído que no lo disfrutaría, me sorprendí al notar que era más divertido de lo que pensaba. Sin embargo, continuábamos estando en el instituto, por lo que todos éramos escrutados bajo la atenta mirada de los docentes y autoridades.
— ¿Querés? —ofreció Shane al acercarse a mí con un vaso. Acepté con una sonrisa y me vi sorprendida cuando al beber sentí el ardor del alcohol en la bebida. Siendo inocente había creído que era solo jugo.
—Esto tiene alcohol —expresé, en un susurró para que ningún directivo me escuchara, ya que estaba prohibido esa clase de bebidas en los bailes escolares.
Shane me dedicó una sonrisa traviesa antes de mostrarme que su saco tenía un bolsillo interno en el cual guardaba una petaca. Reí negando con la cabeza.
— ¿Por qué no estás bailando? —cuestionó Adam robándome el vaso y bebiendo el contenido de un trago, como si de agua se tratase.
Me encogí de hombros y él tomó mi mano dirigiéndonos a la pista de baile. Al instante un chico se pegó a mi espalda colocando sus manos en mi cadera y antes de que pudiera reaccionar, mi hermano lo obligó a alejarse. No me molestó, si no lo hacía él lo hubiera hecho yo. Mi etapa de ser descontrolada y estar con múltiples chicos ya había finalizado. Aunque me costaba admitirlo, desde que había vuelto solo tenía ojos para Keith.
Y como si lo hubiese llamado con la mente su aliento golpeó mi oído cuando su voz susurró: —Tengo una sorpresa para vos.
Giré mi rostro y los latidos de mi corazón se aceleraron ante la mirada dulce y seductora que me dedicó. Ni siquiera volteé a decirle a Adam que me iba con Keith, y fui guiada por este último hasta un escenario que no había notado antes.
— ¿Cuál es la sorpresa? —decidí preguntar, cuando estuvimos frente a aquella estructura y nada ocurrió.
—Espera un minuto. No seas ansiosa —pidió. Cuando nuestros ojos se encontraron, se acercó y con suavidad presionó sus labios sobre los míos por solo unos segundos, y sus labios se veían demasiado tentativos como para rechazarlos. Además de que me fascinaba la sensación que sentía ante un mínimo roce por parte suya.
Comencé a escuchar los gritos y volteé para notar que mi nueva banda favorita estaba sobre el escenario. Un escalofrió recorrió mi cuerpo de manera electrizante.
Ellos eran cuatro chicos y una chica. Era raro, la forma en que sus voces tan distintas se complementaban de maravilla, y también era raro el hecho de que me gustaran tanto porque mi gusto era más dirigido a cantantes consagrados. Sin embargo, Free Souls me fascinaba desde la primera vez que los escuché a tal punto de estar pendiente de sus movimientos y actividades. También, quizás tenía que ver con que los cuatro chicos eran muy atractivos, y sus voces eran tan hipnóticas como sus miradas. Sus nombres eran James, Nicholas, Zac y Kyle; y personalmente mis favoritos eran los dos últimos. La chica, Adeline, también era hermosa y su sonrisa transmitía paz, simpatía y alegría.
—Hola a todos. Nosotros somos Free Souls y hoy estamos acá por una invitación especial. Queremos dedicarle nuestra próxima canción a Alisson Whitmore —anunció Kyle antes de sonreírme; y por dios, yo podría haberme desmayado tranquilamente ante aquella sonrisa tan perfecta.
Ellos comenzaron a cantar una melodía lenta contando la historia de amor de dos adolescentes, haciéndome sentir identificada con cada palabra.
— ¿Te gusta la sorpresa? —preguntó Keith observándome.
Giré para poder verlo y sentí como mi piel se erizaba. Me acerqué y fui rodeada por sus brazos.
—Me encanta —susurré provocando que nuestros labios se rozaran. Y en ese momento sentí que no necesitaba nada más, que con solo tener su completa atención, ya era feliz.
Lamento mucho no haber subido capítulo ayer, pero fue un día largo y agobiante y no tuve tiempo. Espero hayan disfrutado el capítulo y otra vez les pido disculpas.
No olviden votar y comentar.
Con amor, Sabrina♥
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Rosas para Alisson | COMPLETA
Novela JuvenilAlisson y Keith han sido mejores amigos desde siempre. Y toda su vida sería más sencilla si se limitaran a ser solo eso, pero en su lugar ellos se dejan llevar por sus sentimientos y se confunden mutuamente. "Keith siempre iba a ser mi debilidad. El...