Emma
Caminaba buscando algún rostro conocido cuando alguien me chocó y caí al suelo sintiendo mi cabeza rebotar debido al impacto. Sentía como todo a mí alrededor daba vueltas pero a su vez una sensación de alegría me invadía y no podía evitar sonreír sin ninguna razón.
—Mierda Emma, perdóname —se disculpó una voz grave que podía reconocer hasta en estado de inconsciencia. Uno de sus brazos rodeó mi cintura e hizo que estuviera de pie al instante sin esfuerzo alguno, sentía mi cuerpo demasiado liviano, y cuando Adam creyó que estaba suficientemente estable decidió dejar de sostenerme, lo cual fue una muy mala idea porque volví a caerme. Sin embargo, comencé a reír y Adam me ayudó de nuevo riendo conmigo.
—Mejor no te voy a dejar sola —susurró él, presionando con fuerza mi cintura, mientras yo admiraba el celeste de sus ojos con una sonrisa, y pensaba en cuan lindo era Adam, no solo en apariencia, si no que siempre había sido un amigo increíble y una buena persona— ¿Por qué me mirás así?
—Porque te amo —respondí abrazándolo con fuerzas.
—No sabía que eras una borracha cariñosa —mencionó con una carcajada—. Vamos que te voy a acompañar a tu casa. No quiero que seas demasiado cariñosa con el chico equivocado.
Asentí con la cabeza, sin moverme un centímetro. Estaba demasiado distraída, admirando cada detalle de él mientras sonreía de forma bobalicona. Noté como las comisuras de sus labios se elevaban al ver como lo miraba, y el rubor invadió mis mejillas por sentirme avergonzada de lo expuestos que estaban mis sentimientos, pero no podía alejar mis ojos de los de él. Era como si estuviera hipnotizada.
Relamí mis labios y eso captó su atención. Adam estaba mirando mi boca y eso solo hacía que yo deseara mucho más un beso suyo.
Hacía meses que me percaté de que había desarrollado sentimientos por él, pero nunca lo había admitido porque siempre parecía tener una chica con quien salir. No estaba interesado en mí y yo lo sabía. Sin embargo, no pude evitar que mi boca se acercara a la suya como si tuvieran un imán. Y a pesar de que sabía que no era su tipo, eso no evitó el dolor que sentí cuando él se alejó.
Mis ojos se llenaron de lágrimas, e intenté eliminarlas mientras caminaba delante suyo hacia la puerta, con la cabeza agachada, sin siquiera querer mirarlo.
Llegué hasta la calle y cuando el sentimiento de que todo daba vueltas regresó a mí, permití que Adam me sostuviera por la cintura y me guiara hasta su auto, y me permití quedarme dormida en el asiento del copiloto, sabiendo que él cuidaría de mí.
Quería dedicarselo a cualquier persona venezolana que lea esto. Espero que estén bien y pronto su país también. A su vez me preguntaba ¿Desde qué lugar de la galaxia me estás leyendo? Diganme en los comentarios.
Yo soy de Argentina, y si buscan algún país para visitar les recomiendo el mio, prometiendoles que su hermosura los/las va a enamorar.
Espero disfruten el capítulo y no olviden votar.
Con amor, Sabrina♥
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Rosas para Alisson | COMPLETA
Ficção AdolescenteAlisson y Keith han sido mejores amigos desde siempre. Y toda su vida sería más sencilla si se limitaran a ser solo eso, pero en su lugar ellos se dejan llevar por sus sentimientos y se confunden mutuamente. "Keith siempre iba a ser mi debilidad. El...