Rosas para Alisson | COMPLETA

Capítulo 22

Alisson

Emma se mostraba nerviosa. Caminando alrededor de su cuarto, mientras yo usaba mi celular sobre su cama. Me había invitado a dormir, y había aceptado al instante sin perder la oportunidad de que volviéramos a ser tan cercanas como antes. Saber que ella no sentía la confianza suficiente para contarme sobre sus sentimientos por mi hermano, me había destrozado, pero luego de pensarlo por muchas horas, llegué a la conclusión de que era mi culpa.

Desde que había vuelto no habíamos tenido una verdadera oportunidad para hablar sobre temas profundos.

—Ali —habló llamando mi atención. Ella no paraba de jugar con sus manos, por lo que me puse de pie y las tomé para que se sentara frente a mí, y a pesar de que esperé a que continuara, ella no lo hizo. Continué viendo mi celular, sabiendo que ella continuaba con sus ojos puestos en mí, y había visto la culpa en ellos por lo que sabía lo que iba a decir—, me gusta mucho Adam. Y creo que podría llegar a estar enamorada.

—Qué novedad —dije irónicamente—. Pensé que nunca me lo ibas a decir.

— ¿Estás enojada? —preguntó preocupada, haciéndome sonreír.

—No, no estoy enojada. Nunca podría estar enojada por algo así. Aunque... quiero decir, no estoy enojada porque te guste mi hermano, esas cosas no se controlan. Lo que no me gusta es que no me lo hayas dicho, y haber tenido que enterarme por otra persona. Durante años estuve lejos, y yo entiendo que hayamos perdido la relación, pero ahora estoy acá, y si vamos a intentar ser mejores amigas de nuevo, no nos tenemos que ocultar cosas.

—Tenés razón. Perdonáme —se disculpó—. Desearía no haber demorado tanto en decírtelo, pero no estaba segura de nada. Adam es casi tanto o más complicado que vos.

— ¿Qué? Yo no soy complicada —negué.

—Por supuesto que lo sos —afirmó haciéndome rodar los ojos.

—Entonces... ¿ahora somos cuñadas? —pregunté con una sonrisa llena de felicidad y éxtasis.

—No lo sé —dijo ella escondiendo una sonrisa.

—No me sorprende para nada. Ustedes siempre tuvieron cierta química especial, además era obvio que Adam tenía su mirada puesta sobre vos, no entiendo como no se dieron cuenta antes. Yo creí que iba a volver de París y ya iban a ser novios.

—Supongo que no queríamos admitirlo. Vos debes de entender también, es difícil. Si no funciona, se arruina la amistad.

—No, la amistad no se arruina. Menos una de tantos años —negué y automáticamente mi mente fue volando a pensar en mi amistad con Keith.

—Si Ali, las amistades se arruinan —sentenció, antes de comenzar a usar su celular, mientras yo comenzaba a pensar en qué podría pasarme a mí.

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Con amor, Sabrina♥