La muñeca del pasado

IV

— Tengo miedo— admito en voz baja y temblorosa.

¿Hace cuanto fue la última vez que senti un miedo tan grande? Hacia mucho ya de eso. De echo, fue cuando aún era un niña y le temia a los monstruos bajo mi cama. Recuerdo no poder dormir por miedo a que esos monstruos me dañaran. Sin embargo, todo eso se marchaba cuando mi madre y padre se acostaban a mi lado y cantaban para mí a la par que me confortaban con caricias.

Era casi como magia.

Pero justo en este momento ¿Pasaria lo mismo ahora? Ya no le temo a los monstrous bajo mi cama sino a...¿A qué, exactamente?

— ¿Porqué?— doy un brinco en mi lugar y miro sobre mi hombro.— ¿Qué te sucede nena?¿Que te tiene de esta manera?— su ojos ambar me miran preocupados a cada paso que da. Me tenso y sin saber porqué, sin si quiera pensarlo, trato de retroceder.

Sacudo mi cabeza en negación y detengo mi cuerpo a la fuerza.

No estaba en peligro.

— N-nada— mi voz no sale como debe, ni siquera es entengible.

Y como si nada, esa simple respuesta había desatado una ola de lágrimas. Como si hubiera apretado un botón que abría las compuertas a mis desbordados sentimientos. Sus brazos se envolvieron a mi alrededor; brindandome su apoyo a través de suaves caricias. Cierro mis ojos y las recibo con los brazos abiertos, pero nada pasa, ningún alivio...el agujero en pecho no desaparece.

— Shh...ya, tranquila— trato de hacerle caso, hago el intento de dejarme llevar por su voz baja y cálida pero se me dificulta.

Es como si no fuera a su presencia la que necesito...

¡Imposible!

Hago una mueca adolorida ante la punzada que da mi cabeza. Mis pensamientos me estaban confundiendo, aturdiendo mis acciones y nublando mi razonamiento.

¿Que sucedia conmigo? ¡Era William, mi mejor amigo! No había nadie–a excepción de mis padres– que pudiera necesitar más en un momento como este.

"Seung."

— Te amo mucho— susurra reforzando sus brazos a mi alrededor— Lo sabes ¿Verdad?— no me muevo ni hablo, no puedo. Mi mirada esta perdida en la pared. Lo único que ocupa mi cabeza ahora es ese nombre desconocido, que a su vez me resultaba familiar— sabes que puedes decirme lo que sea. No importa qué, voy a estar contigo hasta el final.

"Nadie se queda para siempre...todos se marchan. Te quedaras sola al final. Nadie soportará estar a tu lado, eres una muñeca utilizada y rota."

— Will...— murmuro alejandome un poco— ¿Realmente te quedarás hasta el final?— mi pregunta le toma por sorpresa. Nunca le había cuestionado su lealtad, no dudaba de ella, en serio. Sin embargo, esa pregunta saltó desde las profundidades de mi cabeza y salió por mi boca sin consentimiento. No recuerdo ni siquiera haberla pensando antes de decirla.

"Nada estará bien. Nada dura para siempre. Todo se daña; hasta el blanco más puro se vuelve un amarillento enfermizo."

— Por supuesto, Charlotte.— la seguridad en sus palabras me da un golpe justo en el pecho. Una sacudida a mi estado que me saca del agujero al cual estaba metida.

La niebla gris que tomaba control de mi mente se dispersa y me doy cuenta de las estupideces que dije e hice.

Esta no era yo.

"Déjame en paz"

¿Como pude? ¿¡Que pasaba conmigo!?

Nunca había rechazado a nadie. Nunca había sido tan fría y distante.

Me giro por completo y me abrazo con fuerza a él, hundo mi rostro en su pecho. La calidez que él emanaba ya familiar para mí. Lo conocía desde que era una niña, él era el niño con el cual jugaba y peleaba a cada segundo. Lo conocía como a la palma de mi mano y él me conocía a mí de igual manera. Desconfiar de él era como desconfiar de mi misma.

Cierro mis ojos y muerdo mis labios, reprimo todo sollozo y trato, con todas mis fuerzas de controlar mis emociones. Retengo mi respiración y niego con sutileza.

"No puedes llorar ahora. No puedes preocuparlos más. No debes preocuparles más. No seas débil. ¡Eres un marioneta y ellas no lloran!"

Abro mis ojos grandemente y el aire que contenia escapa de mis labios. Las lagrimas agrumeradas en mis ojos nublan mi mirada; un pequeño pitido molesta mis oídos y otra punzada cruza mi cabeza de un lado a otro.

Esta no soy yo. Esta no puedo ser yo.

Dos pares de brazos más se envuelven a mi alrededor. Los conocía bien, eran ellos, mis padres. Mis progenitores, los dos pilares más importantes de mi vida. Las dos personas que han estado conmigo desde mi primer respiro, incluso antes. Ana y Nicolas, los que me dieron la vida.

Esa voz es igual a la mía pero...

Es ahí, entre las tres personas más importantes de mi vida que mi llanto cesa. No obstante, no es por el apoyo que estoy recibiendo que me detengo, sino por la constante vocecilla en mi cabeza. Esa que suena como la mía pero es muy distinta. Fría, calculadora, apática y desconfiada.

"Todos saldran dañados si se quedan a mi lado. Eres una muñeca maldita."

De un segundo a otro dejé de escuchar sus palabras de consuelo. Mi mente quedó en blanco y mis ojos se perdieron entre la oscuridad. La calidez que mis seres queridos emanaban haciendoce cada vez más lejana y desconocida. 

"Eres débil y estúpida..."

Dos pares de ojos azules iguales a los míos aparecen frente a mí. Mi corazón se acelera y mi cabeza palpita. Los ojos contrarios parecen leer y juzgar mi alma, reírse de ella. Yo, incapaz de hacer algo más, miro los orbes azulados con miedo. Lo único que los diferenciaba de los míos era el odio, el dolor y la tristeza que en ellos abundaba como el agua en el mar. No había nada más allí.

Esos ojos tan siniestros eran lo opuesto a mí. Esa no podia ser yo. Era imposible.

No pueden ser míos...yo..

Aun así, sabía, en algun lugar recondito en mi cabeza, que esos ojos eran los míos. Una versión rota de ellos.

¿Que significaba esto?

— Por favor, no se vayan.

No me dejen caer.

...No lo es.

Vuelvo en mí y miro por la ventana. El cielo estaba nublado, una tormenta se avecinaba. El fuerte viento que azotaba contra los arboles lo dejaba claro. Venían malos tiempos.

"Eres patetica, esclava."

Mi corazón da un brinco feroz y cierro otra vez mis ojos, la angustia viajando a paso firme a través de mis venas.

Ya sé a que le tengo miedo, Will.

Estoy asustada de mi misma.

¡Holi! Espero hayan disfrutado el capítulo y pudieran entender un poco más de que va esta temporada. Si no...bueno, en próximos capítulos lo aclarare. (๑'ᴗ')ゞ

Btw, ¿Que tal les pareció?

Bueno, no tengo nada más que decir así que me marcho ya. (●'▽'●)ゝ

¡Un abrazo psicologico gigantesco!

See you later, alligator ° ͜ʖ ͡ – ✧

Att: Naomi :3