Capítulo 34

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Narra Malú

Desperté en una habitación de hospital, Vanesa estaba sentada a mi lado, con una mano agarrando la mía y con la otra mirando algo en su móvil. Apreté su mano y eso hizo que me mirase de inmediato.

- Hey, mi amor.

Se inclinó dándome un beso en la frente y yo le sonreí.

- ¿Como te encuentras? - Me preguntó sonriéndome.

- Creo que estoy bien.

Me quedé unos segundos callada y observando la habitación.

- ¿Que hago aquí?

- José llamó a la ambulancia, un equipo medico intentó calmarte, pero perdiste el conocimiento así que te trajeron al hospital, ahora deberías estar bien, pero de todas formas tendrás que pasar aquí la noche, en observación.

Soplé al oír eso, odiaba los hospitales y más aún pasar la noche en ellos.

- Malú... - Me dijo Vanesa tras un breve silencio.

La miré.

- Tienes que denunciar a Gonzalo, esto no se puede quedar así.

Suspiré cerrando los ojos y volví a mirarla cogiendo aire antes de responderle.

- No voy a denunciar. - Dije con serenidad y firmeza.

- Pero Malú...

Alzó las cejas sorprendida y antes de que continuase la interrumpí.

- Hace tiempo que conseguí deshacerme de él, alejarle de mi vida, una denuncia solo removería las cosas, además de ser un escándalo, que por supuesto no quiero pasar. - hice una breve pausa - Vanesa, estoy bien, ahora soy feliz, contigo, y te aseguro que no se volverá a acercar a mi, a sido mi error permitir que hablase conmigo a solas y yo asumo las consecuencias.

Esta vez fue ella quién me interrumpió.

- No Malú, no, no te culpes de nada, ¿me oyes? el único culpable aquí es él.

Me agarró de las manos entrelazando nuestros dedos.

- Lo siento, pero no voy a denunciar, la decisión no es la correcta, ya lo sé, soy consciente de ello, pero respetame, por favor...

Susurré al terminar de hablar, Vanesa me sonrió no muy de acuerdo con mi decisión, me dio un tierno beso en la mano y esta vez fui yo quien le sonrió.

- Te quiero Vanesa - Le dije tirando de ella para que se acercase a mi.

Se sentó al borde de la cama y me besó, despacio pero con ganas, quedándonos sin aliento, respirando de nosotras, nos besamos como si de la última vez se tratase, dusfrutandonos bien, pero con cuidado, ya que me dolía todo por los golpes que me había dado Gonzalo.

- Te quiero Lula. - me dijo entre mis labios.

Le Sonreí.

Me empecé a quitar las vías con cuidado, la aparté un poco y me levanté de la cama.

- ¿Que haces?

Me miró con asombro.

- Irme. - La miré sonriendo.

- No, no, Malú, que no puedes.

Vanesa estaba totalmente flipando, intentó hacerme entrar en razón mientras yo acababa de cambiarme y me ponía mis tacones, iba a salir cuando justo entró un doctor en la habitación.

- Uy, ¿que haces levantada? - parpadeó varias veces mirándome de arriba abajo.

- Pues irme, como usted bien puede comprobar estoy en perfectas condiciones, ¿Ve?

Estiré mis brazos y di un giro sonriéndole, cogí mi bolso y me lo colgué del brazo para después salir de esa habitación dejando ahí al doctor junto con Vanesa, que no tardó ni un segundo en venir corriendo detrás de mi.

- No te puedo creer. - dijo haciendo énfasis en cada palabra mientras reía.

Reí también, me agarré de su brazo y le dejé un suave beso en los labios a la par que salíamos de aquél hospital.

- ¡Malú! ¡Malú!

Escuché gritos y un montón de flashes que me impedían ver con claridad, pero intuí que estaba lleno de periodistas. Vanesa me agarró de la mano y estiró de mi para que la siguiese.

- ¿Que nos puedes contar sobre lo que te ha pasado?

- ¿Estás bien?

- ¿A que se deben las marcas de tu cara? ¿has tenido algún accidente?

- ¿Han sido tus fans Malú?

- ¡No por dios! Si mis chicas son un amor - Dije abriendo grandes los ojos tras la barbaridad que acaban de decir.

- ¿Ha sido una pelea Malú?

- ¿Que hace Vanesa contigo?

Escuchar esto me dejó de piedra, pero hice caso omiso y seguí caminando de la mano de Vanesa, ahí me di cuenta que hablasemos o no esta imagen iba a dar mucho que decir, pero me daba igual, era mi vvida, no me iba a esconder, aun que tampoco iba a hablar.

- ¿Son ciertos los rumores de que mantenéis una relación formal?

- Está todo bien, gracias chicos. - fue lo único que alcancé a decir.

Salimos de entre todo el barullo de periodistas y fuimos hasta su coche, que por suerte estaba aparcado en zona privada y no nos pudieron seguir.

- ¡Hay dios! ¿Pero como pueden estar aquí siendo tan tarde? ¡Que pesadilla!

Me reí con su comentario, estaba nerviosa por la situación, puse mi mano en su muslo y me acerqué lentamente hasta sus labios para besarla, y lo hice.

- ¿Sabes que no pueden venir hasta aquí, pero que están ahí delante y nos pueden ver, no?

Me dijo aún entre mis labios y sonriendo.

- Que miren, que fotografíen, que opinen y digan lo que quieran, no me voy a esconder, esta vez no.

Volví a besarla, entrelacé mis dedos con los suyos, después de un rato saboreándola apoyé mi frente en la suya y le susurré.

- Te amo malagueña.

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Lo siento por tardar tanto en actualizar y dejaros con la intriga jeje, he estado bastante ocupada estos días, ya sabéis, el verano y tal (todas las culpas a mi chica)

¡Un beso! 😘

Yo, más yo que nuncaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora