XXXVI

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Sheilak POV:
El entrenamiento de Rey continuaba, mientras Obi y yo aprovechábamos para entrenar un poco juntos. Logramos conseguir dos varas, estaban abandonas en la cabaña donde me estaba quedando a dormir.
Nuestras peleas siempre era muy intensas. Podíamos notar como nuestras fuerzas chocaban, pero a la vez se unían.
-Esta vez no perderé Obi.
-Eso es lo que tú crees. Volveré a vencerte de nuevo -me dijo con su sonrisa. No podía resistirme a ella.
Luchábamos cada vez más rápido, nuestros golpes eran cada vez más fuertes. Sabía que si le hacía un barrido iba a predecirlo antes. Decidí saltar y ponerme de espaldas a él. Se dio la vuelta y le empuje. Él cayó al suelo y mi vara se paró en su cuello.
-¿Que has dicho que ibas a vencerme?
-Has sido rápida. Esta te la guardo.
Le ofrecí mi mano para que se ayudarle a levantarse. Me la tomo y se levanto del suelo.
Estábamos muy cerca y no podíamos evitarlo. Nos besamos.
-¿Pero que estáis haciendo? -pregunto Luke.
Nos separamos rápidamente. Luke nos había descubierto.
-Maestro...yo...yo...-no podía decir nada.
-Habéis roto el código Jedi. No merecéis seguir siendo caballeros Jedi....y menos todavía maestros.
-Se que suena raro, pero pienso que si dos personas se aman, no hay problema.
-¿Y alguno de vosotros se volviera del lado oscuro cuando le ocurra algo a uno de los dos?
-Eso no va a pasar Maestro Skywalker -dijo Obi.
-Seguro que Obi-Wan, tu bisabuelo no te enseñó eso...pero de tal palo tal astilla. Él se enamoró y tuvo que huir -dijo Luke.
-Mi bisabuelo no huyó cuando se enamoró. No sabes toda la historia. Él se peleó con el maestro Jinn y lo único que hizo fue acostarse con una chica. Después se arrepintió mucho, pero cuando supo que iba ser padre, ayudó a la familia para que no le faltara de nada -dijo Obi.
-Ademas, yo soy descendiente de Qui-Gon. Se que un Jedi está mal que se enamore, pero si los dos son correspondidos y hay respeto. No hay problema -le dije a Luke.
-Si que lo hay, habéis roto el código Jedi -dijo Luke.
-Desde ahora seguiré el código Jedi Gris....si usted no respeta lo que tengo con Obi-Wan, eres el único. Los maestros Yoda, Kenobi I y Qui-Gon, están de acuerdo con nosotros. Es hora del cambio -le dije mirando desafiante a los ojos.
-Debéis marcharos...jamás debí de haberte entrenando. Me has fallado Sheilak Anthane.
-Si no puedo hacerte cambiar de opinión para que vengas con nosotros, es imposible que te haga entrar en razón con esto. Al menos yo cuando me hiciste huir, volví para ayudar a la Resistencia. No soy una cobarde como tú. Huiste a esta isla para morir, lejos de la gente que te quería. Lejos de la poca familia que te quedaba. Yo al menos no me giré lejos de la mía. Adiós Maestrl Skywalker -le dije y me marché para la cabaña.
Deje a Luke sin palabras y Obi me siguió el paso.
Una vez en la cabaña recogió mis pocas pertenecías y me fui a la nave. Obi me llamaba, pero yo lo estaba ignorando. Hasta que me freno agarrándome por el brazo derecho. Empezó a llover.
-Obi suéltame -le dije y él me soltó.
-Sheilak...-me miro a los ojos y yo me eché a llorar en su pecho, mientras él me abrazo- Te dije que entrara en razón, pero tardará más.
Me separé de él y él me limpió las lágrimas de los ojos.
-Ya no se que hacer con el...pensaba que iba hacerle entrar en razón, pero no es así...será mejor que nos vayamos.
Íbamos a subir la nave cuando Rey vino con nosotros.
-Subid nos vamos -dijo Rey.
Los dos nos miramos, Rey tampoco consiguió que Luke volviera. Teníamos que ayudar a la Resistencia.
Rey enciendo la nave y empezamos a volar lejos de aquella maldita isla. Ahora sería el último lugar en toda la galaxia que quisiera estar. Sentía dolor dentro de mi. Jamás me había enfrentado así a Luke.  Me dolió mucho haberle dicho todo lo que le dije, pero era la verdad. El no quería enfrentarse contra Kylo Ren, no era el mismo maestro que me enseñó todo lo que un Jedi debe de saber.

Conseguimos llegar a la nave de la Primera Orden a la velocidad de la luz. Nos disponíamos atacarla desde dentro. El plan podía ser el último que hacíamos, pero no teníamos más opciones.
-¿Estas segura de hacer esto? -pregunto Obi.
-Si, más que nunca. Se nos acaban las oportunidades y si sale bien tendremos más tiempo para huir. Encontraremos un planeta para crear un nueva escuela de Jedi y que la Resistencia no tenga que huir más.
Primero iríamos en cápsulas de emergencia y después atacaríamos.
-Cuando despegue ponte fuera de alcance y quédate allí hasta que recibas mi señal de reunión -dijo Rey.
-Grrrrrrhgr- dijo Chewie.
-Y dile a Finn se lo ves antes que yo. Si le ves...
-Grgrgrg.
-Le puedes decir eso. Muy bien.
-Grrr.
Antes de que Rey se marchara, nosotros nos huimos a ella.
-Rey ten mucho cuidado -le dije.
-Si y vosotros también.
-Que la fuerza nos acompañe chicas -dijo Obi.

Se cerraron las cápsulas y nos lazaron a la nave imperial. Era una medida arriesgada, pero podría funcionar.
La nave aterrizó dentro, al quitarse el humo pude ver tras ella a Cinter. Al irse dos soldados de asalto aparecieron delante de mí con una esposas.
Se abrió la cápsula y los soldados de asalto nos atraparon poniéndonos unas esposas. Me quitaron el sable. A Obi y Rey les paso lo mismo.
Torm también estaba allí.
Nos llevaron hacia un ascensor. Cada uno de nuestros némesis llevaba nuestro sable.
-No tenéis porque hacer esto, percibo el conflicto en todos vosotros. Pero en ti Kylo, te está machacando. Ben cuando nuestras manos se tocaron, vi tu futuro. Solo una sombra pero clara y concreta. No te inclinarás ante Snoke. Cambiaras y yo podré ayudarme. Lo he visto -dijo Rey.
-Yo también vi algo y debido a lo que vi se que el momento serás tú quien cambies. Te quedarás conmigo. Rey vi quiénes son tus padres.
-Eso no es así Kylo, Rey no se unirá al lado oscuro -le dije mirándole desafiante.
-No estes tan segura, porque hasta tu puedes unirte al lado oscuro. El lado de los Jedi es muy aburrido y falto de poder -dijo Cinter.
Iba a contestarle cuando las puertas se abrieron y allí estaba Snoke.

Los últimos maestros JediDonde viven las historias. Descúbrelo ahora