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Obi-Wan POV:
Nos guiaron dentro de la base. Yo acompañe a Sheilak hasta la enfermería, por suerte esta vez me dejaron de entrar, así podía estar con ella.
La doctora le quitó la parte de arriba y empezó a quitarle las vendas. Con cuidado despego los parches y limpio las heridas con agua fría.
Llamo a un robot médico para que le curara y cicatrizara las heridas. Tumbó bocabajo a Sheilak, le giró la cabeza para la izquierda con cuidado y el robot empezó hacer su trabajo con un pequeño láser.
-Tranquilo Maestro Kenobi, la Maestra Anthane estará curada antes de tiempo y solo le quedará una cicatriz en la espalda.
-Muchas gracias doctora...¿como sabe mi nombre y el de ella? -le pregunto.
-Las noticias vuelan y se que sois los únicos maestros Jedi con vida. Es fácil reconoceros nada más por vuestras ropas y por cierto soy Sonmov -me respondió.
-Encantado -le tendí mi mano y ella me dio la suya.
-¿Donde estoy...?
Nos giramos y vimos que Sheilak había despertado. Fui hacia ella.
-Llegamos a Felucia sin problemas. Ahora mismo la doctora Sonmov te está curando, pronto podrás irte, pero ahora te toca descansar y recuperarte.
-Tenemos que ir a buscar a los próximos Jedi...-quiso levantarse pero se lo impedí.
-Maestra Anthane aún no está en condiciones de levantase y mucho menos de viajar. Hasta que yo no le dé el alta, usted no podrá levantarse de aquí -dijo Sonmov.
-Vosotros ganáis...¿pudo girarme?, es demasiado incómodo estar boca abajo.
-Tienes que esperar un poco Maestra Anthane, ya queda nada para que el robot termine y después empezaremos con el hombro izquierdo. Vengo en un rato, ahora vuelvo -dijo Sonmov y se fue de la enfermería.
Le toque la frente y ya no tenía fiebre. El antibiótico le había hecho efecto.
Me acerqué a ella y nos dimos un beso en los labios.
-Te dije que no volvieras a salvarme. Odio verte así, por mi culpa...otra vez estás así...
-Obi no es tu culpa, es de los Sith. Si no hubiéramos luchado contra ellos no hubiera pasado esto, pero tampoco hubiéramos podido ayudar a Rey. No te martirices más ¿vale? -me dijo y yo solo pude llorar.
Con la mano izquierda me limpio las lágrimas.
-Eres demasiado bueno. Tienes un gran corazón y estoy segura que tu bisabuelo está muy orgulloso de ti.
Íbamos a besarnos de nuevo, pero la doctora apareció.
-Bueno chicos, esto ya a terminado. No vas a necesitar vendas pero sí que te pongan esta pomada, y ahora veremos ese brazo. Obi ayúdame a reincorporarla y ponte esta camiseta de tirantes.
Le dio una camiseta de tirantes y le ayude a ponérsela.
-Muy bien vamos ver ese hombro -empezó a quitar las vendas- esta muy bien curado -atrajo de nuevo al robot y empezó su trabajo- tardar menos esta vez, pero si necesitaras una venda, las quemaduras por láser son peores que la de fuego.
-Doctora Sonmov muchas gracias por todo lo que está haciendo por mi -dijo Sheilak.
-No hay de que y ahora relájese el robot ha terminado -empezó a venderle el hombro- bueno ahora descanse, cuando tengan una habitación para vosotros os lo haré saber.
-Gracias pero nosotros no...-Sheilak no le dio tiempo permitir.
-Se que estáis juntos y no hay nada de malo en compartir habitación. Así podemos dar más espacio a más rebeldes -dijo la doctora y se fue.
-Estaré deseando que al fin podamos dormir juntos -le dije y ella me sonrió.
Se levanto un poco y me beso en los labios. Yo le correspondí. Nuestras lenguas se alegraban de encontrarse otra vez. Cada beso que me daba la había que la amara más y más. Le doy mil gracias a la fuerza por habernos unido.

Sheilak POV:
Nos separamos cuando nos empezó a faltar aire.
Escuchamos tocar la puerta y eran mis hermanos con sus chicas.
Al verme despierta la cara de preocupación se les fue de un soplido. Me alegre mucho de que hubieran sobrevivido al ataque, no sé si llegaría a soportar otra pérdida más.
Me contaron que les habían dado una habitación y empezarían buscar las cosas para el bebé.
-Sheilak, Arous y yo hemos pensado que nos gustaría mucho que fuera la madrina de nuestro hijo cuando nazca. Me encantara que te tenga como referente.
-Aceptare encantada de ser la madrina de vuestra hija -les dije.
-Aun no es seguro que el sexo del bebé, pero seguro que estará encantado de tenerte como madrina.
-No olvidaros del tío Marc.
-Tranquilo, porque tú serás el padrino y no quiero que nuestro hijo salga igual de loco que tú -dijo Eric.
-Primero gracias y segundo, no lo podrás evitar -dijo Marc sonriendo con malicia.
Los seis nos reímos.
-Por cierto, ¿para cuando vuestra boda? -pregunto Rung.
-Nosotros no...-no podía responderle y Obi mucho menos.
-No lo ocultéis más, se os nota nada más como os miráis pasa saber que os amáis. Puede que los hombres no lo noten, pero las mujeres lo notamos enseguida -dijo Rung.
Ahora mismo no sabía que responder. Pero Arous me salvo.
-Antes deberías de casarte tú ¿no crees Rung? -pregunto Arous.
Entonces vi a Marc poniendo una rodilla en el suelo delante de Rung. Del bolsillo sacó un anillo en una cajita.
-Quería espera un poco más pero ya no aguanto. Arous Niley, ¿haríais el favor de casaros con este tremendo idiota? -pregunto Marc y Arous empezó a emocionarse.
-Claro que si -aceptó sin duda Arous y lo beso cuando le puso el anillo.
Nosotros aplaudimos.
-La siguiente eres tú hermanita -dijo Marc.
-Por ahora no hay prisa, las mejores cosas vienen despacio -le dije mientras Obi me agarraba mi mano izquierda.
Entro la doctora y le dio la felicitaciones a Marc y Arous. Después se fueron todos dejándonos a Obi y a mi con ella.
Nos dijo que ya había encontrado una habitación para los dos. Me levante y ella nos guió a nuestro nuevo hogar. Por suerte podía caminar, pero despacio. Al legar vimos la habitación. Era una cama de matrimonio con un armario grande. Una mesa de escritorio y una cómoda.
-Mientras la hará el apaño hasta que podáis tener casa propia si queréis -dijo Sonmov.
-Es perfecta -les dije.

Los últimos maestros JediDonde viven las historias. Descúbrelo ahora