Me encontraba navegando Reddit desatentamente con mi celular y hablando en altavoz con Shannon, cuando sucedió: vi su rostro en uno de los anuncios laterales. Pasó demasiado rápido. Hice clic en un enlace y fui enviado a otra página; regresar a la página anterior no me volvió a mostrar el anuncio.
—Qué raro.
—¿El qué? —preguntó Shannon—. ¿Estás viendo cosas en el internet de nuevo en vez de estarme prestando atención?
—No, para nada —mentí.
Bueno, una mentira a medias. El portal de la página estaba lleno de los mismos titulares reposteados, sin sentido y sensacionalistas, que siempre había tenido. Navegar por ellos se había vuelto más una cuestión de hábito, sin prestar ninguna atención real.
—Solo estoy…
Me congelé a la mitad de la oración cuando vi su rostro de nuevo. Esta vez, estuve preparado y toqué el anuncio con mi dedo. Lo primero que cargó fue una fotografía de Shannon en una estación de gas rellenando su tanque. La única luz provenía de los faroles crudos del local.
—Shannon, ¿te detuviste por combustible en tu camino a casa?
—Pues, sí. Pero aún estoy a unos veinte minutos.
Hice el cálculo mental rápidamente. Ella vivía en Newark, a unos cuarenta y cinco minutos al este de Columbus. Eso la situaba plenamente en el medio de la nada arbolado.
—Alguien tiene una fotografía tuya en su sitio web.
Ella se rio.
—Apuesto que es un exnovio —Y después de una pausa, preguntó—: Espera, ¿hablas en serio?
Me desplacé de arriba hacia abajo en la página tratando de descifrar qué demonios estaba viendo.
—Parece que acaban de tomar la fotografía. ¿Andas vestida con una sudadera rojo oscuro y pantalones?
Su respuesta llegó acompañada de un ruido tenso de confusión.
—Pues, sí, pero es la misma con la que me visto siempre. ¿Quién habrá tomado eso? ¿Y cuándo? ¿De qué mierda es esa página?
Deslicé mi dedo hacia abajo para hacer que apareciera la dirección del sitio web en la barra de búsqueda.
—Muerte en vivo punto com.
—¿Muerte en vivo? ¿Qué se supone que es eso? ¿Es como una de esas páginas de extorsión que piden dinero para quitar tus fotografías?
Me desplacé hacia el otro extremo y encontré un cronómetro para una transmisión de video que estaba a punto de comenzar en dieciocho segundos.
—No estoy seguro. No me da buena espina. Están a punto de transmitir algo.
Me le quedé viendo a medida que aparecía el indicador circular y luego llenaba la pantalla de negro. La perspectiva se movió abruptamente por un momento, como si alguien se estuviera alistando, y luego pude ver un tablero de mandos de un vehículo grande, probablemente de una camioneta. La cámara se alzó para enfocarse en un hombre con un pasamontañas negro, pero no era él quien sostenía la cámara.
«Bien, gente», dijo con emoción mientras conducía; su voz siempre levemente distorsionada. «Esta es una nueva ronda para nuestro sitio web más reciente. Les mostraremos quién manda a estos imbéciles; eso les dará algo en que pensar». Mientras utilizaba su otra mano para guiar el volante, levantó su teléfono con la fotografía de Shannon en la estación de gas. «Este es nuestro primer objetivo. Estamos a unos dos minutos detrás de ella, pero la alcanzaremos rápido. Es una carretera recta y no hay desvíos en los siguientes diez kilómetros, así que no la perderemos». El camarógrafo fuera de foco se giró para mostrar el camino revestido por la noche. Escuché un clic; los faroles se apagaron. La voz distorsionada dijo: «¡Entrando en modo nocturno, primor! Nunca nos verá venir».