No es demasiado tarde, pequeño, aparta la vista y olvida.
Sucio bastardo imprudente ¿No he sido lo suficientemente claro?
Esta será la última ocasión... No leas esto
Bien pequeño; el daño ya es irreparable, no dejes de leer llegado a este punto, es demasiado tarde
Tan solo lee con atención
Quiero que visualices el armario más cercano a ti, aquel que tengas prácticamente al lado. Bien, ahora haz un ejercicio mental, si es necesario detén tu lectura unos instantes y procede a hacer lo que ahora te indico:
Imagina a alguien dentro de él; a una persona metida. No es necesario que detalles sus facciones o características, tan solo ponte en situación: HAY ALGUIEN DENTRO DE TU ARMARIO, A ESCASOS METROS DE TI
¿Ya lo has hecho?
Tomate tu tiempo, pequeño, prosigue cuando termines.
Ahora no cometas el error de girarte, y ni se te ocurrirá mirar ese armario; tan solo céntrate en la idea de que hay alguien dentro, que llene tu pensamiento y lo cubra todo con su morbosa presencia.
Bien, ¿Has conseguido ponerte en situación?
Detén tu lectura y céntrate en esa idea un poco más...
De verdad, esto es importante, imagina que hay alguien ahí.
Vale... si dejas de hacer ruido y te concentras lo suficiente... Es posible que... Le oigas
Shhhh no te muevas, el silencio debe ser total... tan solo escucha...
¿Lo has oido? ¿No?
Por supuesto que no JAJA ¿Como vas a oirlo? Es imposbile que lo oigas amigo porque él ya no esta en el armario.
No quiero que te alarmes cuando te lo diga pequeño, pero el hombre del armario se ha tomado la libertad de engancharse en el techo de tu cuarto.
Te aconsejo que no mires, pequeño, pero si ya lo has hecho no te preocupes, muy probablemente él haya sido más rápido que tú.
Debiste hacerme caso y no ser tan cabezota, pero tus ansias de morbo son demasiado grandes ¿Verdad?, bien ¿Quieres morbo? Morbo tendrás pequeño amigo, tenlo por seguro.
Se esconderá la mayoría del tiempo y es probable incluso que no llegues a verle.
Quizá algún mal sueño que el provocará te recordará su existencia.
Pero la mayoría del tiempo se dedicará a esperar cuando tus guardias estén bajas.
Reza cada noche para que no decida honrarte con su presencia.
Y procura mantener los armarios cerrados cuando el sol se postre ante la oscuridad.
Que no estén ni ligeramente abiertos pequeño. Ni un poquito.
No te mires al espejo después de medianoche.
Puede que tengas suerte y se olvide de ti, pero amigo, que sepas que cada vez que pienses en él su presencia se hará más fuerte.
Trata de olvidarle, no le dediques ni un instante.
Y trata en la medida de lo posible de vivir una vida normal, siempre que él te lo permita.
Si sus visitas son demasiado frecuentes y tu padecimiento insoportable;
Visitale en el espejo donde haya decidido alojarse y pídele que acabe con tu sufrimiento.