Amor Entre Sombras [Remastered]

Capítulo 22: Official love.

~Jason~

La Cafetería está en completo silencio. Matthew y yo seguimos besándonos y, por primera vez desde que llevé a mi madre al hospital, siento como todas mis preocupaciones desaparecen por completo. Incapaz de aguantar más tiempo la respiración, me separo del vampiro que me mira fijamente a los ojos, escrutando mi alma.

– ¿¡Pero qué!? —Gritan todos en nuestra mesa, a excepción de Erik y Alice.

– ¡Lo sabía! —Exclama el susodicho idiota, levantándose— ¡Sabía que erais maricas!

– Al final le patearé el culo... —Me susurra Matthew, haciéndome reír— Eh, una carcajada...

– El nombre técnico es homosexual. —La voz de Sharon, la reportera del blog del instituto, llama nuestra atención— Y, por favor, Erik... Estamos en 2020, dejemos ya de usar términos despectivos para hablar de los espectros de la sexualidad y del género... No me seas retrógrada.

– Gracias, Sharon. —Digo, dibujando una sonrisa— Imagino que tu visita a esta mesa no es amistosa, sino profesional...

– Así es. Me gustaría entrevistar a la nueva pareja más 'chic' del instituto, para hacer público este bombazo. ¿Qué preferís, Mason o Jatthew?

– En primer lugar, no es un bombazo. —Responde Matthew, Mirad lo hermoso y atlético que es JJ, cualquiera saldría con él... Y, en segundo lugar, ninguno. Mason es un nombre muy común y Jatthew es horrible.

Incapaz de evitar reírme, apoyo la cabeza sobre el hombre de mi novio, embriagándome de la tranquilidad que me transmite, a pesar de su fría piel y su inmóvil corazón. No feliz de su respuesta, Sharon nos pregunta cuándo podemos darle las primicias de nuestra relación, así que hago lo que mejor se me da hacer cuando trato con ella: darle largas.

– ¿Por qué no montas una de tus famosas fiestas? He oído que son espectaculares, pero como soy un empollón, pues nunca asistí a una. ¿Quién sabe? Quizás ahí tengamos ganas de hacer la entrevista...

– ¡Oh, sí, Jason! ¡Una fiesta de Sharon, por favor! —Gritan mis compañeros, cambiando el foco de atención tal y como me he propuesto.

– Esto no ha terminado, Jason... —Me murmura Sharon, dándose cuenta de lo que he hecho.

La muchacha se va, siendo perseguida por algunos de los jugadores. Así, los únicos que quedamos en la mesa somos Alice, Matthew, Brady, Mark, Chloe, Leah, Erik y yo.

– Entonces... ¿Sois pareja? —Pregunta Mark, sorprendido.

– Sí. —Digo yo, mirando a Matthew a los ojos— ¿Hay algún problema? Con el equipo, digo.

– No, claro que no. —Responde Brady, sonriendo— No importa con quien salgas, siempre y cuando no interfiera con tu rendimiento en el campo.

– Pero, Matty... ¿Eres gay? —Pregunta Chloe, visiblemente afectada.

– Qué pena que ya no se pueda acostar con él, ¿verdad? —Me susurra Alice, haciéndome reír.

– De hecho, soy bisexual. Pero ahora mismo estoy enamorado de Jason, así que voy a enfocarme en ver a dónde voy con él, en vez de si me gustan más las mujeres que los hombres o viceversa. —Sutil forma de decirle que ya no podrá tener nada con él, la verdad.

– Ah, Jason... —En cuanto Erik abre la boca, sé que lo próximo va a ser una burrada— Entonces, en las duchas después de los entrenamientos...

– Tranquilo, hermoso, que verte desnudo no hará que me empalme mientras nos duchamos. Estoy enamorado de Matty, así que no es sólo procesos fisiológicos, sino que es algo más filosófico. Más del corazón. Eso sí, que no se te caiga el jabón al suelo... Ah, no, espera, que eso solamente pasa en las prisiones.

Todos en la mesa comienzan a reír ante mi comentario, pero la verdad es que se lo merece por todas las cosas que he tenido que aguantar estos días que he estado en el equipo. Enfadado, el muchacho toma la mano de la otra animadora que se ha quedado con nosotros y sale disparado de allí.

– No debería alegrarme, pero iba siendo hora de que alguien lo pusiera en su lugar... Yo lo haría, pero como capitán no puedo humillar a mis compañeros de esa forma. —Me dice Brady, colocando su mano sobre mi hombro como muestra de apoyo— ¿Nos vemos mañana en el partido?

– Claro, estoy deseando jugar contra los Caballeros Templarios.

– Y yo estoy deseando no tener que pelearme de nuevo contigo... —Me susurra Matthew en el oído, entre carcajadas.

– Eh, que ya domino mejor el tema de la transformación. —Le respondo, sacándole la lengua.

– Joder, qué adorables sois. Me piro antes de que me dé diabetes. —Comenta Mark, levantándose de la mesa también.

Brady y Chloe van detrás, aunque la muchacha se detiene un segundo para mirar a Matthew a los ojos. Imagino que, después de todo, no podrán tener las citas que el vampiro le prometió a cambio de los favores que nos ayudaron en el pasado. Alice explota a carcajadas y yo le regalo un tierno beso a Matthew porque sí. De repente, nuestros móviles suenan al mismo tiempo, por lo que sabemos al momento que se trata de una nueva publicación del blog del instituto.

Mercy Grace High School Diary

Nuevos romances y, ¿nuevas rupturas?

¡Buenas! ¿Cómo estáis, mis queridos Halcones del Mercy Grace? Aquí Sharon con una nueva y jugosa noticia de la que estoy segura ya os habréis enterado, ¿verdad? ¡Alerta roja! ¡Matthew White ha sido atado con el nudo de la relación estable con el mismísimo Jason Jay! Lo siento, pequeñas Halcones, pero parece ser que el chico guapo y bisexual, ha decidido intentarlo con otro chico.

Pero, con este nuevo romance, ¿peligra otro tan fuerte como el de Brady y Chloe? Porque, Halcones, las paredes del instituto murmuran infidelidad. Y es que, al parecer, nuestra capitana de las animadoras no puede mantener la lengua y las manos lejos de los jugadores de fútbol. De ser así, ¿habrá llegado a Jason antes de Matthew, o habrá llegado a segunda base con los dos?

Os prometo seguir indagando... Me despido con muchos besos, vuestra reportera favorita. ¡Arriba, Halcones!

Al leer la noticia, miro a Matthew y a Alice fijamente a los ojos, incapaz de procesar lo que acabo de leer. Sharon se ha aprovechado de nuestra relación para sacar a la luz los posibles problemas en la relación de Brady y Chloe. ¿Sabrá la pelirroja que Chloe iba detrás de Matthew?

– ¿Cómo sabe lo de los jugadores de fútbol? —Pregunta Matthew, levantándose de la mesa— Y ni siquiera son todos... En cuanto se lió con Erik, dejó de hacerlo.

– Espera, ¿se acostó con Erik?

– No, solamente se enrollaron una noche, pero Chloe se arrepintió y dejó de ligar con los compañeros de Brady. Solo ha estado con Gordon, que se graduó el año pasado, con Erik... Y con Mark.

– ¿¡Mark!?

– Estaban borrachos y se lo contaron a Brady al día siguiente. Fue cuando Brady y Mark estuvieron peleados por una semana el año pasado.

– ¿Y si ha sido Erik? —Pregunta Alice, mirándome— Después de humillarlo, ha podido ir a buscar a Sharon y contarle que él y Chloe se enrollaron... Como Brady sabe que Chloe iba detrás de Matthew, de esta manera puede crear problemas entre vosotros y él, para joderos vuestra relación.

– Suena demasiado ingenioso para que se le haya ocurrido a un lerdo como Erik... Pero no es descabellado. —Digo, al mismo tiempo que suena el timbre— En cualquier caso, de momento sólo podemos ignorarlo. Os veo luego, ¿vale?

Camino hacia el teatro, viendo que la señorita Vega todavía no ha llegado. Debido a lo cerca que estoy de terminar la canción, me adelanto, sentándome en el piano y toco algunas teclas salteada antes de ponerme de lleno con la melodía. Pero, antes de poder comenzar a cantar, el secretario Pickton me aplaude sentado en una de las butacas, con los pies apoyados sobre el respaldo de la de enfrente.

– ¿Señor Pickton? ¿Qué hace aquí?