Capítulo 32.1: Drixeuxs.

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~Thomas~

El Clan quiere que yo sea líder. Creen que yo puedo estar a la altura, pero Ian es mucho más poderoso que yo. Quizás se deba a Jason, al hecho de que es mi yerno y, por tanto, "puedo tenerlo bajo mi control", pero yo no quiero serlo. No sólo es un esfuerzo que no quiero, sino que además significa tener que mudarnos a Asheville, por lo que Matthew y Jason no podrían estar juntos.

Si fuera por el Sanador, ser líder es lo último que querría el Clan, si lo pienso detenidamente. Porque separar a Matthew del hombre lobo significaría dejar de tenerlo como aliado. ¿Por qué quieren que sea líder entonces?

– ¡Declaro mi derecho de casta! —Grita Roger, el hermano pequeño de Ian.

La capilla se queda en completo silencio y los rostros de Sheila y Thomas empalidecen. No puedo creer que su hermano quiera ser líder. Y tampoco quiero que lo sea. Si Ian Fitzgerald es violento, su hermano Roger es peor. Mucho peor. Aunque, estoy seguro de que lo hace para vengarse de nosotros. Porque, ante todo, es un hermano orgulloso y sobreprotector.

– ¡Podríais llevar a cabo una votación, como en la democracia actual! ¿¡Os imagináis a nuestros candidatos matándose por la Casa Blanca!? ¡Haced lo mismo! —Grita Jason, tras investigar lo que es el derecho de Casta.

Incapaz de detener el proceso, nos llevan hasta el claro de los rituales y, allí, nos ordenan llevar a cabo el Drixeuxs. Así pues, me despojo de la ropa hasta quedar en calzoncillos —Antiguamente era un taparrabos de piel de algún animal— y tomo una de las dagas de la caja en la que están guardadas.

– No quiero matarte, Roger... —Le digo, caminando hacia un lado.

– Pues tendrás que hacerlo, ¡porque yo sí quiero! —Me responde, caminando hacia el otro.

Nos apuntamos con las dagas y permitimos que la luz de la luna active las runas inscritas en el mango, dándole poder a la hoja que comienza a brillar con una tenue luz azul. Lo peor del Drixeuxs no era el duelo a muerte, sino el tener que beber de la sangre del perdedor y comerse su corazón para "absorber su fuerza". Hace años que no bebo directamente de alguien y temo que, después de todo este tiempo, no pueda parar.

Comienza la pelea y Roger intenta clavarme la daga en el corazón. O eso creo yo, ya que, una vez lo suficientemente cerca, desvía la trayectoria hacia alguna parte, haciendo cortes por diversión.

– ¿¡Esto es todo lo que tienes, líder!? ¡Eres patético!

– No soy patético, soy pacífico. A diferencia de ti y de tu hermano, no necesito mostrar mi fuerza física para ser mejor.

– ¡Cállate!

Roger me clava la daga en el hombro, haciéndome gritar de dolor. Consigo darle una patada en el estómago, separándolo de mí. Tras arrancarme la daga de la piel, se la lanzo con mi brazo sano, pero la esquiva sin dificultad, recogiéndola del suelo. Siento una ira inundar mi corazón y mis ojos se vuelven negros. Estoy perdiendo el control. Sé que estoy perdiendo el control, pero no consigo volver en mí.

– Ahí está el verdadero Thomas White... El carnicero de Sheffield. Ya era hora.

– Muere, escoria. —Escupo a pesar de mis esfuerzos por no hacerlo.

En un pestañeo, me encuentro frente a Roger y le golpeo en el estómago, tirándolo al suelo. Le doy una patada en la cara, rompiéndole la nariz y haciéndolo volar unos metros hasta caer de espaldas. El vampiro ríe a carcajadas, levantándose del suelo y apuntándome con la daga. Entonces, corre como un kamikaze hacia mí, dispuesto a morir.

– ¡Jason! —Grita Matthew, mientras yo asesto una puñalada para clavarle la daga a Roger en el corazón.

Una figura peluda aparece frente a nosotros, interponiéndose en el camino. Las dagas siguen su camino, clavándose en las manos del hombre lobo, que aúlla con todas sus fuerzas, devolviéndome el control de mi cuerpo. Ante el tacto de la sangre de Jason, las hojas de la saga se rompen en pedazos, ante los ojos de todos los vampiros.

– Ha i-interrumpido el Drixeuxs... —Murmura un vampiro, boquiabierto.

– Ha r-roto las dagas lunares...

Jason vuelve a aullar y una onda expansiva nos dispara a Roger y a mí en direcciones opuestas. Ha sido como si el hombre lobo hubiera empujado las partículas del aire con sus manos, creando un huracán que me ha hecho volar por los aires.

– ¡No voy a permitir que os matéis! —Exclama Jason, con voz gutural— ¡Thomas White no es un asesino! ¡Es el hombre más amable que he conocido jamás!

– Pero la tradición...

– ¡A la mierda la tradición! ¿¡Queréis un ganador!? ¡Yo os voy a dar un ganador!

El hombre lobo camina hacia Roger, pisoteando su pecho. El vampiro forcejea y golpea la pierna sobre él, pero no consigue liberarse.

– ¡Ríndete y jura lealtad a Thomas!

– ¡Nunca! ¡Nunca haré caso a un chucho y mucho menos al chucho que humilló a mi hermano!

– ¡Roger Fitzgerald! ¡Jura lealtad a Thomas!

– ¡No!

De una patada, Jason le rompe el cuello al vampiro, dejándolo inconsciente. Al darse cuenta de su estado, se arranca las dagas de la mano, dejando que los cristales caigan al suelo. En cuestión de segundos, sus heridas sanan por completo.

– Roger Fitzgerald ha caído derrotado y el ganador es Thomas White. No es necesario sacrificar su vida.

Pero Claude no cree que sea suficiente y le clava una estaca en el corazón a Roger, convirtiéndolo en ceniza. Jason gruñe con rabia y se abalanza sobre el vampiro, pero este consigue darle una bofetada que lo deja KO. Matthew corre hacia su novio, gritando su nombre una y otra vez.

– El Drixeuxs ha terminado a pesar de las circunstancias y un nuevo líder se levanta para el Clan. Arrodillaos ante Thomas White.

Todos comienzan a arrodillarse ante mí, mientras yo intento reaccionar. Sheila se coloca a mi lado, arrodillándose también, mirándome con una mezcla entre orgullo y tristeza. Porque está orgullosa de que sea el líder del Clan para poder cambiar las cosas tal y como siempre soñé, pero está triste de lo que eso significa. Porque, después de todo, vamos a tener que mudarnos a Asheville.

Y Jason no sabe lo que acaba de costarle darme el liderazgo. Porque, no lo va a perder a Matthew, sino que, además, Ian iba a estar más enfadado que nunca al haber hecho que mataran a su hermano.

Amor Entre Sombras [Remastered]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora