Amor Entre Sombras [Remastered]

Capítulo 39: Burying my master.

~Matthew~

Alice conjura a Jason para hacerlo desaparecer junto a Ian a algún lugar apartado en el que conversar. Aunque al principio no haya estado muy de acuerdo con el plan, al verlos aparecer no muy lejos de allí, en la zona superior del cementerio, decido dejarlo estar para enfocarme en los enemigos frente a nosotros. De repente, siento la presencia de tres hombres lobo, quienes se colocan a nuestro lado.

– Queremos ayudar. —Dice el Alfa, demostrando ser los tres lobos que vimos la pasada luna llena.

– Nosotros también. —Dicen los tres chicos, colocando junto a nosotros.

– ¿Estáis seguro? Es muy peligroso...

– Nunca lo hemos dudado.

Los Exterminadores hacen aparecer sus armas, lanzándose al ataque junto a los vampiros de nuestro alrededor. Mientras que Alice hace explotar a algunos de los vasallos de Ian, los hombres lobo y yo nos aseguramos de que los mercenarios no se acerquen a los humanos que se entretienen con algunos vampiros.

Aunque son muy rápidos y fuertes, los tres hombres lobo demuestran una coordinación impresionante, encadenado golpes y esquivas sin parar. Yo lo tengo un poco más difícil, pero gracias a los daños colaterales de sus ataques —como, por ejemplo, que un Exterminador salga disparado hacia el que me ataca, llevándoselo por delante—, apenas me han herido.

Mis ojos viajan hacia Jason, que se encuentra sentado sobre mi maestro, incomodándome por un segundo debido a la postura en la que se encuentran. De repente, mi novio coloca sus manos sobre las sienes de Ian y parece perderse en sus pensamientos.

– ¡Cuidado, Matthew! —Exclama Alice, usando sus poderes para implosionar un Exterminador lejos de mí— ¿Estás bien?

– S-sí, me estaba asegurando de que Jason estuviera a salvo...

– Si nos necesita, pedirá ayuda. —Dice el Alfa, acabando con el último vampiro— Jason es muy especial. Tanto, que se resiste a la autoridad su propio creador.

– Es que nosotros somos su manada, no tú. Por lo que no eres su Alfa. Para él, esta manada es solamente de Betas. Todos estamos al mismo nivel.

– ¿Incluido los humanos? —Pregunta la mujer lobo, esquivando un ataque de uno de los Exterminadores.

De repente, Chloe coloca sus manos sobre los hombros de la mujer, haciendo una pirueta en el aire que termina con una patada en el brazo del Exterminador, tirando su katana al suelo. Al caer de pie, la muchacha le pasa el arma a su novio, quien ataca al desarmado enemigo, quien esquiva el ataque invocando otra arma.

– Incluido los humanos. —Dice Brady, viendo como la katana desaparece de sus manos.

– Vaya, impresionada estoy.

Los tres Exterminadores se reúnen frente a nosotros, apareciendo delante de nuestros ojos en un pestañeo, armas en alto. De repente, pero, escuchamos a Jason rugir como nunca antes. Incluso Mike se ve afectado por ello, recuperando su aspecto humano. Al mirar hacia mi novio, veo como Ian sale disparado por los aires por un malherido Jason, que lo ataca con las mismas ondas de choque que aquella vez en el Drixeuxs de Thomas y Roger.

– ¡JJ! —Grito, corriendo hacia allí— ¡Espera, que te curo!

Me muerdo la muñeca y mi sangre comienza a brotar. Mancho los dedos de mi otra mano y comienzo a untarla en las heridas de mi novio, viendo como las heridas y los moratones desaparecen de inmediato. Los chicos corren a nuestro lado, acercándose a ver el estado del hombre lobo.

– Oh, dios mío... —Musita Alice, dándose la vuelta para vomitar.

Giro la cabeza y veo a Ian clavado en una bandera, junto a la tumba de un exmilitar. Su cuerpo luce más pálido que de costumbre y sus labios ya han comenzado a ponerse morados, imagino que por todos los años que lleva muerto. Pero, lo increíble es que no se convierte en ceniza como el resto, a pesar de estar muerto. Porque no hay duda de ello. Ian está muerto.