Amor Entre Sombras [Remastered]

Capítulo 25: Poetry, love songs and demons.

~Matthew~

El sábado pasa a una velocidad vertiginosa. Tras realizar mis rutinas matutinas, me dirijo al hospital para ir en busca de Jason. Aunque gran parte de su casa estaba carbonizada, la planta superior había sido asegurada por los bomberos, por lo que el muchacho podía seguir usando su cuarto de baño y su dormitorio para ir a buscar ropa, porque no quería molestarnos a Alice o a mí, viviendo con nosotros por una temporada.

Aunque ha sido más complicado sacarlo de la habitación de hospital de su madre que intentar convencerlo de que pase unos días en mi casa, ahora nos encontramos en su dormitorio, buscando un conjunto para el Open Mic de esta tarde.

– Deberías ir elegante. —Le digo, haciendo que saque la cabeza del armario— Es un Open Mic casi nocturno, así que la gente irá arreglada por ser un sábado noche. No querrás destacar por ir en chándal o tejanos rotos, ¿verdad?

– Visto así...

– Oh, ¿sabes dónde tengo ropajes muy elegantes?

– En tu casa, lo sé. Pero no voy a irme unos días, pesado. Además, si voy con tus trajes del gótico o la época victoriana, seguro que me envían a un psiquiátrico.

– Perdona, pero la moda victoriana es imperecedera.

– ¿Impe-qué?

– Atemporal, perpetua, sempiterna.

– Al menos conozco la palabra sempiterno... —Murmura el hombre lobo, sacando una camisa con pico V de color azul cielo y unos tejanos oscuros.

No es lo que tengo en mente, pero es elegante cuanto menos. Una vez cambiado, salimos del hogar de los Jay para caminar hacia el Open Mic. Como después marcharemos a casa de Mark, conducir nos pareció una mala idea si bebíamos. Aunque siendo criaturas sobrenaturales puras, la única persona del grupo que se va a emborrachar es Alice, porque nuestras capacidades de regeneración impiden que el alcohol tenga efecto en nuestra sangre.

Así que decidimos cero coches para que Alice no condujera bajo ninguna circunstancia. La cargaremos como un saco de patatas si hace falta.

Al llegar, nos encontramos con Alice en la puerta, vestida con un hermoso vestido rojo de tirantes. Una vez dentro, nos encontramos al señor Pickton sentado en la barra. Nada más vernos, nos saluda con la mano, lo cual nos parece súper extraño. Como cortesía, decidimos saludarlo de vuelta, sentándonos en una mesa del centro del establecimiento.

Un hombre con un micrófono en la mano sube a una especie de tablao que imagino hace de escenario. Va vestido con una camisa blanca y pantalones negros, así que deduzco que se trata del maestro de ceremonia, que presentará el Open Mic.

– ¡Bienvenidos al séptimo Open Mic que se celebra en el Coffee & Buddies Café! Este año he visto muchos valientes que se han apuntado para subir al escenario, así que, Joseph... —El hombre mira hacia la barra, forzando todas nuestras miradas en la misma dirección— ¡Esta noche haces caja! —Su comentario nos hace reír a carcajadas, aliviando los nervios de Jason e, imagino, de muchos otros— Bromas, aparte... Veo que hay mucha gente a la que le apasiona la poesía, la narración y la música, así que será mejor que empecemos. El primero en subir es un hombre que dice ser el Neruda del Siglo XXI.

Un hombre trajeado, alto, fuerte, con el cabello largo y una barba afeitada sube al escenario. Parece un empresario, pero es difícil decirlo pues todos van vestidos elegantemente, tal y como sospeché.

– Mi nombre es Riccardo DiAngelo. Vine a esta ciudad cuando tenía 19 años, aunque desde pequeño adoro la poesía. Aquí va mi poema.

El poema de Riccardo era bastante bueno. Habla sobre un amor que dejó en Italia para cumplir su "sueño americano" y el arrepentimiento que tiene ahora por haberse establecido, dejando dicho amor atrás. El final es esperanzador, dando a entender que algún día volverían a verse.