3.

44.4K 3.4K 655
                                    

Liss cogió el papel y se lo pegó con agua a la boca. Luego se giró a Lucas.

Este se separó lo más rápido que pudo. Se giró hasta su amigo, nerviosamente y fue a ponerle el papel, cerró los ojos, luego no sintió algo duro como cuando besó el papel con Liss, era algo blando y cálido, apenas duró un segundo, pero al separarse, se dio cuenta que no había papel, el papel estaba en el suelo.

Todos gritaron de emoción, la mayoría se reía por el incidente, en cierto modo era gracioso.

Ambos chicos estaban impresionados.

Darío cogió el papel del suelo y se lo puso en los labios, y se giró al de al lado, Andrés, su Primo.

<Genial.> Pensó Lucas.

Por lo menos no se le había caído el papel.

Miró a Darío, y este a él, ambos estaban sonrojados. Levemente. Pero lo estaban.

Lucas estaba eliminado y Darío seguía jugando.

Al final solo quedó el de gafas y Andrés.

<Cómo no.>

¿Cuantos "besos" se habrán dado ya?

Al final, a Andrés se le cayó y Darío ganó.

—Se supone que soy la cumpleañera y tenía que ganar yo.—Liss fingió estar ofendida para hacer sonreír un poco a Lucas.—Yo que tantas ganas tenía de besarte, va mi Primo y se me adelanta.

Liss notó como Lucas se tensaba.

Liss rió incómodamente pero Lucas no parecía que iba a imitarla.

—Ehm...Bueno...Iré al otro juego, ¿te vienes?

—Paso.

Liss asintió y se fue Algo confundida.

El padre de Lucas se le acercó.

—Hijo, lo que pasó en el juego...No es gran cosa, tampoco hay que estar así, con esa cara de asco.

Lucas miró a su padre.

Él no tenía cara de asco, simplemente no podía dejar de pensar en el beso y eso lo estaba matando.

No es la gran cosa...No es la gran cosa...Él trató de convencerse.

—Tienes razón. Um...voy a ir hablar con Dari, ahora vuelvo.

—Como quieras.

Lucas buscó a Darío.

Soltó un gruñido, estaba enfadado. Primero, su mejor amigo no confía en él, luego su mejor amigo estaba con otro, para colmo, se besan, y luego el otro se va a besar con otro, ja, maldita sea, estaba tan enfadado, con todos, sobre todo con Darío, y consigo mismo. Y para subir al máximo de su cabreo, no estaba con Darío, en casi toda la maldita fiesta estaban separados.

Cuando lo encontró por a saber por cuanta vez en el día, lo encontró otra vez con Andrés.

—¿Te quieres alejar ya un poco de él? Todo el día con él, déjale en paz.—Gruñó Lucas acercando a Darío a sí mismo.

—Soy su mejor Primo, es normal.—Reprochó Andrés.

—Y yo soy su mejor amigo. Vámonos.—Le dijo a Darío.

Y lo volvió a meter al baño.

Besos indecentes (1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora