Darío se sentó en el sofá nada más llegar a casa.
Se sentía cansado. Muy.
—Ay...Que hambre.—El moreno se levantó con mucha pereza y esfuerzo a la cocina.
Abrió la nevera. Nada parecía de su agrado.
—¿Mamá? ¿Puedo ir a tu casa?—Preguntó nada Más cuando su madre le atendió la llamada.
—¿Ocurre algo?
—Bueno...Se diría que no tengo qué comer.—Comentó cogiendo una manzana verde, a la que le dio la vuelta y tenía algo negro.
Puso cara de asco y la tiró a la basura.
—¿Y Lucas?
Darío se quedó inmóvil. ¿Que diría? "oh, no sé, un día me desperté después de haber hecho el amor con él y había una carta en la que me decía que necesitaba tiempo."
—Mmm...Discutimos. ¿Puedo ir a casa o no?—Cambió de tema.
—Claro que sí, cariño. Te espero.
Darío colgó.
Sentía una presión en el pecho.
—Duele...—Murmuró recordando a Lucas.
Esto del amor era una mierda.
Se dispuso a ir a la casa de su madre, pero un mareo le hizo parar.
—Uh...Ese ha sido fuerte.—Se rió.
——————
Os imagináis que tiene una grave enfermedad?
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Besos indecentes (1)
Teen FictionDarío y Lucas son mejores amigos, un día van a una fiesta de cumpleaños y se dan un beso sin desearlo. Desde ese momento, todo cambia. +EMBARAZO MASCULINO. (No es omegaverse, solo pueden tener hijos. Si este género no te gusta o te parece extraño...