Capítulo 4

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Le dimos las gracias al violinista antes de que se marchara y él nos respondió con una cordial sonrisa.
-Noah ha sido la mejor noche de mi vida- le dije mientras le abrazaba - Eres el mejor, ¿a dónde ha ido ese celoso adicto a la violencia?
- Pues que se ha enamorado - me respondió mientras me agarraba de la cintura y me besaba el cuello.
Cuando oí esas palabras ya no pude resistirme más y me tiré hacia él. Me cogió en brazos y empezamos a besarnos como la primera vez después de la fiesta de Warren.
- Eeh, espera fiera - me dijo Noah, no pude evitar reírme de ese comentario- Quien diría que tuvieras tantas ganas de...ya sabes...
-Cállate bobo- ya había comenzado a sonrojarme- Entonces, ¿a donde vamos?
- Ven- me cogió de las manos y volvimos al coche.
Unos minutos más tarde llegamos a un hotel, el Royale, donde Noah me había pedido salir oficialmente. Llegamos a la habitación, era la misma a la que fuimos después de la fiesta de verano.
- Noah Flynn, está noche te estás superando- le dije mientras me quitaba el vestido.
Noah me miro sorprendido ante mi iniciativa y estaba tan distraído mirandome que de un pequeño empujón lo tumbe en la cama, entonces él se arranco la camisa y yo fui hacia la cama, me cogió de la cintura y... la cama nos atrapó.

              * * * *

Cuando me desperté vi a Noah salir de la ducha, con una toalla atada a la cintura.
-Buenos días, princesa- me dijo cuando se dio cuenta de que estaba despierta.
-Buenos dias- le dije sonriendo- Estoy teniendo un déjà vu me parece- y nos empezamos a reír.
- Me encantó todo lo que hiciste anoche, me sorprendieron mucho tu detalles - me levanté y le plate un besazo en la mejilla.
-Me alegro mucho Shelly, esa era la idea.
-Bueno me voy a la ducha - le dije - cuando termine nos vamos que mi padre me va a matar.
-Vale, lo que tu quieras- me dio un beso en los labios y me metí en la ducha.
Quien me iba a decir lo que había cambiado la cosa en tan poco tiempo, de pensar en no ver a Noah hasta dentro de meses a ahora tenerlo a mi lado, de tener celos de que compartiera habitación con una chica a que se lo haya inventado solo para hacerme creer que no podía venir y de tener vida amorosa 0 durante meses y ahora tener de lo mejor.
Salí del baño con la toalla puesta pensando en todo esto y me disponía a decír algo a Noah pero vi que ya no estaba en la habitación, ni su ropa, ni su móvil, nada. Decidí llamarlo pero no lo cogía, llamé a Lee y me dijo que se suponía que estaba contigo, ¿y si le había pasado algo? Joder joder joder entonces alguien llamó a la puerta, la abrí y allí estaba Noah Flynn con un ramo de flores.
-¡Tú eres tonto! - dije, medio furiosa medio llorando - pensaba que te había pasado algo o que te habías arrepentido de estar aquí - Noah dejó las flores a un lado y me abrazó.
Era justo lo que necesitaba en ese momento.
-Lo siento Elle- dijo mientras nos abrazabamos-he ido a tu casa a decirle a tu padre donde estábamos y que estabas bien, y ha preguntarle si me dejaba a su pequeña un rato más.
- ¿Y que te ha dicho? - dije un rato después, cuando estaba más tranquila.
-Que si, ¿de verás pensabas que me había arrepentido de estar aquí?
-No, pero últimamente siempre me pongo en lo peor. Deberías haberme avisado de que te ibas.
-Lo se, culpa mía. Tendría que haber entrado mientras que te duchabas para decirte eso, pero es que seguramente me habría quedado allí contigo- me lanzó una mirada de pillin y me puse roja.
-Bueno voy a cambiarme, si quieres ahora desayunamos juntos.
- Es justo lo que estaba pensando - me dio un pico y me fui a cambiarme.
Al salir del hotel nos dirigimos a una cafetería, desayunamos churros con chocolate algo que puso nuestras vidas en peligro.
Noah me pringo la nariz de chocolate y entonces la guerra comenzó, al final los dos acabamos cubiertos y nos dimos un dulce beso con sabor a chocolate.
-Buenísimo - dije
- ¿El chocolate o yo?- me dijo levantando una de sus cejas.
-Siempre serás Noah Flynn, el engreído y el tío más bueno del instituto- Le sonreí - y él más mono - añadí al final.
- No. Me. Llames. Eso. - recalcó cada una de esas palabras y entonces yo comencé a reírme como nunca.
-Me encantas- le dije al oído.
- Y tu a mi Shelly- me respondió.
Salimos de la cafetería y cogimos mi coche, esta vez lo conducía yo, cuando mi padre me regalo el coche yo no era muy buena conductora pero con practica y alguno que otro rasguño conseguí aprender a la perfección.
-¿Hay planes para hoy? - Le dije sin dejar de mirar hacia la carretera.
- Si, pero...
-No me vas a decir a donde vamos- le interrumpi- ya eres predecible Noah.
Él se río.
- Te va a encantar el sitio al que te llevo, se que hace mucho que no vas, y yo tampoco- dijo Noah.
-Mmm...que no había ido desde hace mucho, hay millones de sitios a los que no voy desde hace micho- le dije a Noah haciéndome la enfadada- dame más pistas porfa porfa porfa- y le hice pucheros.
-Lo siento pero todo se estropearia si te lo digo tendrás que esperar hasta esta tarde- me dio un beso en la mejilla que hizo que casi se me escapara el volante- y no te pongas histerica buscando ropa que ponerte, estas preciosa con cualquier cosa- y eso me derritio el corazón.
Deje a Noah en su casa y quedamos en que me recogería a las cinco de la tarde, eso si, con el coche porque si se presentaba con la moto claramente que no me iba a subir.
Cuando llegué a mi casa eran las doce y media de la mañana mi padre estaba en la cocina.
-Hola colega- me dijo-¿qué tal con Noah?
-Mejor que nunca papá, estoy muy feliz.
-Me alegro- me dijo con una sonrisa - pero esto de que te deje salir por la tarde noche y volver por la mañana es temporal.
-Vale papá , te juro que volveré antes.
-Aprovéchalo Elle- me dedicó una triste sonrisa y sabia a lo que se refería.
Yo ya sabía que Noah tendría que volver a Harvard pero ya no le daba tanta importancia, por ahora quería disfrutar al máximo de su compañía, de todo lo que era estar con Noah Flynn.

The Kissing Booth 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora