Capítulo 3

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Entonces alguien me tapó los ojos.
Sus manos eran grandes y...olían a vainilla y a algodón de azúcar, no podía ser ¡o dios no podía ser!.
-¡NOAH ! - grite con todas mis fuerzas.
Entonces las manos me descubrieron los ojos y me gire rápidamente, enseguida empezaron a brotarme lágrimas.
-Hola Shelly- me dijo mostrándome su sonrisa con hoyuelos.
Me tire a sus brazos y el correspondió nos dimos un largo abrazo y luego nos besamos apasionadamente.
No era un beso como los de antes, fue el mejor beso que me di con Noah porque todos los sentimientos de furia, rabia, tristeza y amor se mezclaron en ese beso.
-No me llames mono- me dijo al terminar de besarnos,y la verdad es que se lo iba a decir.
-Noah, te he echado de menos - dije mientras me sacaba las lágrimas- ¡Eres un cabrón! ¿¡Por qué no me dijiste nada?!
- Eso sería quitarle todo el romanticismo al asunto- me dijo con una de sus sonrisa de lado.
-¿Y ahora quién es el tonto romántico? - le dije sacándole la lengua como si fuera una niña pequeña.
Él emitió una pequeña carcajada. Mi corazón parecía estar a punto de explotar.
No pude resistirme ni un solo segundo más, me volví a lanzar a sus brazos y volvimos a besarnos. Está vez fue uno más lento, más íntimo, y me encantó.
Sabía que muchas personas nos estaban mirando pero eso no me importaba lo más mínimo.
-Lee lo sabía todo ¿no?- le pregunte a Noah.
-Claro - guiñó un ojo-, teníamos que distraerte con algo para que no te dieras cuenta de que estaba en mi casa, y además de distraerte con lo de la compañera te distraímos con lo de ir de compras. Ha sido un plan perfecto.
- Que estúpidos sois, me habías asustado con lo de la compañera, ¿tú sabes lo mal que lo he pasado?- y Noah empezó a reírse.
-Con lo de ir de compras he acertado, estas preciosa Elle- cuando dijo eso, con sus ojos azules brillando el corazón se me aceleró.
-Bueno,¿alguna sorpresa más, Don Romántico?
-Tranquila Shelly, la noche acaba de empezar- me guiñó un ojo y sonrió.
'Bendita caseta de los besos' pensé.
Lo mayor parte del tiempo lo pasé con Noah. Estuvimos bailando todo tipo de canciones, desde las más lentas hasta las más movidas, hablamos sobre quien era su compañero de cuarto y como se lo estaba pasando allí, y nos bañamos en el mar.
-Ese bikini te sienta genial - me dijo Noah observandome de arriba a abajo. Entonces empecé a sonrojarme, él se dio cuenta y se empezó a reír.
-Cállate - le dije salpicandole agua.
Noah se acerco aún más a mi, me cogió por la cintura y me metió al mar con él.
-Te he echado mucho de menos Shelly, ya no aguantaba estar más tiempo sin verte- me dijo acariciándome el brazo mientras me agarraba por detrás - Te quiero muchísimo, no se como voy a soportar estar lejos de ti.
- Yo tampoco lo sé Noah - le dije mirándole a los ojos - pero lo más importante es que seguimos juntos.
-¿Entonces es verdad lo que estabas diciendo de mi a las chicas? - me dijo Noah - lo de que nada ni nadie va a hacer que dejes de sentir lo que sientes por mi.
-Claro que lo dije en serio Noah, es la verdad, porque estoy enamorada de ti y nada cambiará eso nunca - Entonces se acerco a mi para besarme, fue un beso dulce y corto, pero sincero, la verdad es que daba igual como fuese un beso mientras que se lo diera a Noah Flynn.

* * * *

Mientras Noah fue a saludar a sus amigos, yo fui con Lee y Rachel. Aproveché un momento en el que estaban yendo a por las bebidas para acercarme, así no les estropearia nada.
-Quien me iba a decir que Lee ayudaría a Noah para que me diera una sorpresa- dije con una sonrisa tonta.
- Por mi mejor amiga lo que sea - me dijo guiñando un ojo.
-Oooh- dije en plan cursi y le di un beso en la mejilla- Y Rachel, ¿tú lo sabias?
-La verdad es que no - dijo mientras miraba a Lee-, él pensaba que se me acabaría escapando, y la verdad es que tiene razón. - nos empezamos a reír.
Noah vino con nosotros y estuvimos un rato lo cuatro juntos. Parecía una reunión familiar, ellos hablando de fútbol y de la universidad y nosotras escuchando y riéndonos de algunas de sus discusiones.
-Bueno, es hora de irnos - me dijo Noah - tengo que enseñarte una cosa.
- Ya empezamos con las sorpresas - dije mientras ponía los ojos para atrás, haciéndome la molesta, a pesar de que ambos sabíamos que me encantaba que Noah me hiciera sorpresas - quien diría que Noah Flinn sería un romántico.
- No hagas ese gesto, se que te encanta que sea un romántico - me dijo mientras me agarraba por la cintura.
- Bueno, pues nos vamos - les dije a Lee y a Rachel.
-Adiós- dijeron los dos a la vez.
- Bueno Noah Flynn, y ¿a donde vamos?

                * * * *

Noah me pidió la llave de mi coche, supuse que conduciría él ya que me tapo los ojos con un antifaz. Calculo que llevábamos unos 20 minutos dentro del coche.
- Noah, ¿cuánto falta para llagar a donde sea que vayamos?
- ¿Impaciente? - a pesar de que no podía ver sabía que en su rostro se dibujaba una de sus sonrisas pícaras.
Unos minutos más tarde sentí como el coche se paro, Noah me sacó del coche con cuidado y me quitó el antifaz.
Lo primero que vi fue una pradera repleta de flores y había un camino hecho con farolillos. Noah y yo lo seguimos cogidos de la mano hasta llegar a una pequeña mesa redonda decorada con un mantel negro, pétalos de rosa por encima y velas, el paisaje era increíble y el atardecer lo hacia verse todo más hermoso.
-Noah, esto es...
-Esto es lo mínimo que te mereces Shelly - me dijo mientras me agarraba las dos manos y me miraba directamente a los ojos.
- Es lo más romántico que puede hacer alguien por mi, muchas gracias - y le di un beso en la mejilla.
Separo una silla de la mesa indicando que me sentará en ella, sorprendida me senté.
- Noah de verdad que no tenias que haberte molestado, con tenerte aqui, a mi lado, me basta.
-Lo se, pero te dije que esta vez lo haría bien asique te he preparado algo.
De debajo de la mesa saco unos platos, eran unos postres y la verdad es que se parecían mucho a...
-¡¿Son los dulces que me regalaste por mi cumpleaños?!
- Te has acordado, eeh. Me alegro que te gustara tanto mi regalo.
Comimos los dulces en silencio. Era un silencio cómodo en el que uno disfrutaba de la compañía del otro, cuando terminamos Noah dio un silbido y de repente apareció un violinista.
- ¿Me concedes este baile? - me dijo Noah al oído.
No puede evitar que se me espacara una risitas a la vez que asentí.
-¿Por qué te ríes? - me preguntó mientras bailabamos.
-Porque esto es bastante surrealista. - admiti con una risita - No me puedo creer que hagas esto por mi - dije más seria.
- Sería capaz de hacer cualquier cosa por ti - su voz era tan sincera que el vello se me puso de punta.
Estuvimos unos minutos bailando en completo silencio.
'La verdad es que Noah es el chico más romántico que puede haber y lo es solamente por mi' cuando pensé eso me sentí la chica más afortunada y la verdad es que lo era.

The Kissing Booth 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora