Capítulo 9: "Repugnantes celos".

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Él se acerca a mí, como siempre, preocupándose en que yo esté bien. Decido no mostrarle afecto alguno pero la canción empeora todo, hace que me de cuenta del daño que me a hecho con ún solo gesto. Y aun que yo no quiera, me hace daño estar así con él, me hace daño estar enfadada con él, casi tanto como tener esas regañinas todos los días.

-Mía, ¿me perdonas?-dice extendiéndome la mano y con una lágrima.

-Si...-susurro y le doy la mano.

Él sonriente me ayuda a levantarme y sin pensárselo dos veces me abraza, yo me sorprendo, pero, tímidamente le abrazo. Al separarnos me mira con media sonrisa, le rodéo para volver a donde están Gemma y Jesús.

A mitad de cámino una voz me nombra a mis espaldas, me giro y allí está él, mi mejor amigo, Pablito. Corro hacía él y me abraza mientras me levanta en el aire y me da vueltas, mientras me deja en el suelo, Dani, se pone a mi lado y mira mal a Pablito.

-¿Qué haces aquí?-digo sorprendida.

-Pasar el día, que suerte haberte visto.-dice abrazandome cosa que hago también.

-Si, bueno, muy bonito el reencuentro, pero tenemos que volver Mía.-dice...¿celoso?

-Adiós.-digo mientras Dani me arrastra cogiendome de la mano y frunciendo el ceño. Llegamos y las cosas ya están recogidas, Gemma me indica que nos iríamos a comer.

Voy a mi casa, me ducho y me cambio de ropa, me pongo un pantalón de talle alto con una camisa azul con lunares y mis vans. Salgo de mi casa y me diríjo a casa de Jesús y Dani.

Casi toco la puerta de su casa cuando escucho mi nombre detrás mía, es Pablo, salto a abrazarle cuando se abre la puerta.

-¿Otra vez por aquí?-digo con los brazos como jarras y riendo.

-Estaba dando un último paseo, ¿te vienes?-dice riendo.

-No, no se va.-dice Dani poniendose a mi lado.

Pablo se va frunciendo el ceño, no le cae bien Dani, se lo noto. Cuando entramos a la casa lo paro poniendole la mano en el pecho y alzando la vista, es más alto que yo.

-¿A qué a venido eso de fuera? ¿No podía elegir?

-No ha venido a nada... Ya habíamos quedado los cuatro para comer.-dice excusándose.

Resoplo y me dirijo a donde estan Jesús y Gemma, esos dos siempre tan acaramelados, acabarán juntos, está claro. Salimos a la calle para irnos al centro, a un "KFC". Por el camino un chico, al pasar por mi lado, 'sin querer' me toca el culo y Dani se gira para mirarle mal.

-Lo siento.-dice a media sonrisa el chico.

-No lo sientas y vete ya si no quieres ganarte una paliza.-dice Dani echándolo.

-¡¿Qué te pasa hoy, Dani?!

No me contesta y seguimos el camino, Gemma se sosprende al ver reaccionar a Dani así, pero, la cara de sosprendido de Jesús las gana a todas. Puede que sean simples celos, pero, ¿celos por qué?

Mientras pedimos Gemma y yo, Jesús y Dani están guardando sitio, yo estoy apollada en la encimera y un chico detrás mía me toca el culo, ¿les a dado a todos con lo mismo? Me giro y le doy una bofetada. Cojo el pedido junto a Gemma y nos vamos hacia la mesa, antes de llegar Gemma me susurra.

-Es que vas probocando mucho, nena.-susurra riendo.

-Ni probocar ni nada, hoy a todos les ha dado por mi culo.-digo en voz alta.

-¿Te han tocado otra vez?-pregunta Dani frunciendo el ceño.

-No...-digo rapida.

-Si.-dice Gemma riendo.

Dani se levanta de allí y se dirige a la cola, donde allí se encuentra el chico que me tocó el culo. Camino detrás suya.

-Ni se te ocurra volver a tocarle el culo.-dice mirando mal al chico.

-Dani dejalo.

-Y si no quiero, ¿qué?-dice el otro con media sonrisa.

-Pues si no quieres te vas a ganar una buena paliza.-dice acercándose al chico.

-¡Dani! Ya está ¿vale? Deja de meterte con todos, ¡déjame vivir!-digo parándolo y dirigiendome al baño.

Escucho decir a Dani al otro chico: "¡mira lo que has conseguido! La próxima vez ni te voy a advertir." Seguidamente corre hacía mí, yo sin acerle caso de sus reclamaciones diciéndome que pare, entro al baño.

-¡Mía!-dice dando golpes a la puerta, no sabe que esta abierta.

-¡He dicho que me dejes vivir!-exclamo.

Él abre la puerta y al entrar cierra detrás suya.

-¿Qué haces? Es el baño de chicas, ¡fuera!-digo empujándolo, me coge los brazos para que pare de empujarle.

-No voy ha salir hasta que entiendas que...-para trás pensae lo que ha dicho.

-que...-prosigo soltándome de sus manos.

El amor es un misterio. [Gemelier]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora