Antes de empezar...
Buenos/as días, tardes o noches lectores de Nunca Te Rindas, ya llegamos a una semana de publicaciones diarias, espero que estén disfrutando la historia y sin más que decir, todos ya pueden comenzar. :)
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Narrador: Alan
-- Lunes 5 de Abril (Md) --La costumbre de mi jornada diaria comenzaba a despertarme, poco a poco abrí los ojos y lo primero que pude llegar a ver fue a una pantera durmiendo profundamente, él siempre se veía tan adorable cuando dormía sobre mi pecho, y por eso me odiaba un poco a mí mismo por tener que dejarlo allí acostado 6 de los 7 días de la semana. Esperé algo de tiempo hasta estar lo suficientemente despierto y consciente para poder moverlo con mucho cuidado, y como la mayoría de las mañanas, otra vez había logrado dejarlo en cama completamente dormido, probablemente también me ayudó todo ese cansancio que Zane tenía anoche, en fin, me cambié y salí al gimnasio para empezar con mi rutina diaria, pero digamos que hoy algo no andaba muy bien.
Alan:*Detiene la caminadora y suspira, un poco adolorido* -¿Con qué así se sentía Zane luego de perder su virginidad trasera, eh? Santo cielo, deveras admiro a esa pantera, a él ni siquiera le molestaba caminar, pero en cuanto a mí...- *Baja de la caminadora y se sienta cuidadosamente en el banco de pesas* -Ni correr, ni caminar y ahora ni sentarme, ¿Qué diablos me hizo esa pantera anoche?
Analizaba el interior del gimnasio buscando qué otras opciones me quedaban, pero al final, ya había hecho las que consideraba serian las menos dolorosas para mí y mi actual condición, por lo que decidí quedarme allí un rato mientras el dolor cedía temporalmente para que pudiera dirigirme a las duchas, y luego, al dormitorio, donde volvería a acostarme con mi pantera para descansar un poco más antes de las clases. Pero mientras esperaba, simplemente una idea surgió, una extraña idea que lograba verse mejor gracias a mi buen humor de anoche, ya que de lo contrario, jamas la hubiera aceptado.
Alan:*Suspira, se acuesta en el banco de pesas y cierra los ojos*.
Imagina una puerta, no la pierdas de vista mientras ésta toma forma, y luego, cuando sientas que tu cuerpo no responde, ábrela, si eres un instintivo y has hecho todo bien, ¡Felicidades! Has entrado al subconsciente profundo, lugar donde habitan tus instintos y puedes hablar directamente con ellos, no son para nada amigables, es más, ellos te odian porque no pueden poseer el cuerpo que actualmente te pertenece, y eso los mantiene aquí encerrados hasta que puedan encontrar una oportunidad que les permita salir.
Alan I.: ¡Pero que sorpresiva e indeseada visita, Alan! ¿Qué te trae a mi castillo?
Alan:*Un poco enojado* Uff... sinceramente, vine aquí solo para liberarme de mi dolor de trasero, pero deberías aprovechar que estoy de buen humor y que fácilmente podría aceptar negociar contigo, aunque ya acabo de recordar porqué nunca lo hago.
Alan I.: ¿Negociar? ¿Acaso tú has dicho... negociar? Jajajaja deveras que ese gatito te agitó el cerebro anoche, pero déjame refrescarte un poco la memoria, te recuerdo que no deseo en lo absoluto un trato donde ambos ganemos, Alan, yo solo quiero que te rindas y tomes mi lugar para que, finalmente, yo pueda tomar el tuyo.
Alan:*Pensativo* Nop, creo que eso no pasara, sabes que ya de por si corro un alto riesgo dejándote medio dominarme en mis descargas, así que, ¿Tú aun solo piensas continuar con todo esto?
Alan I.:*Sonríe maliciosamente* Lo haré hasta que consiga escapar, has tenido a un animal salvaje encerrado por años en una jaula, es cuestión de tiempo para que cree una estrategia que me permita salir para siempre de esta prisión, y una vez que lo haga, yo voy a...
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Nunca Te Rindas [Furry Yaoi]
Teen FictionZane Williams iniciara su carrera en la universidad Esperanza del Pacifico, dispuesto a dar lo mejor y hacer muchas amistades. Alan Griffin, por el contrario, prefiere evitar a las personas y centrarse solo en sus estudios. Lo que no saben esta pant...