Lemon Yan-Gu

LVII

* Narra Yan An *

No podía creerlo. Me sentía horrible por la jornada con los padres de Yeo. No entendía como podían odiarme sin ni siquiera conocerme. Tan solo por querer a su hijo y ser extranjero.
Por qué ellos me odiaban, y sin embargo yo no era capaz de hacerlo?
Yeo se había convertido en el centro de mí mundo, le amaba con locura, y estaba dispuesto a darlo todo por él. Intentaba hacerle feliz y que nunca le faltase nada, aunque a veces me sentía mal novio, como cuando lloraba. Él me dijo que si yo lloraba era porque no era feliz. Acaso él no lo era tampoco? Por eso lloraba? Mi cabeza se llenó de preguntas y miedos. Necesitaba hablar con mi hyung.

- Yeo.
- Dime Yan An. - Dijo con media sonrisa en el rostro.
- Eres feliz?
- Por qué me preguntas esas cosas, Yan An?
- Por favor Yeo, contéstame. Eres feliz?
- Siempre que estoy contigo si.
- Y por qué lloras cuando estás conmigo?

Inclinó su cabeza pensativo y el desenlace fue el esperado. Chang-gu empezó a llorar delante de mí.
Yo simplemente le abracé.

- Yeo, no quiero estar contigo si conmigo estás sufriendo. Quiero que seas feliz, quiero que rías, pero no quiero que llores y menos por mi culpa...
- Yan An, eres el único motivo por el qué sonrío. Desde que estamos en el grupo siento una gran presión. Mis padres no me apoyan en nada, y, a pesar de vivir con personas a las que considero mi familia, en muchas ocasiones me siento solo. Tengo anorexia y depresión. Los desmayos son mayoritariamente por eso... Soy sensible, y las cosas me afectan mucho más ahora. A veces necesito llorar Yan An. Pero a quien siempre necesito es a ti. Tú me complementas y me tranquilizas. Si me siento mal por no ser capaz de hacer algo, tú siempre estás ahí. Tengo miedo de fracasar...

Mis ojos se llenaron de lágrimas también.

- Soy idiota hyung. Como no pude darme cuenta de todo esto. Soy un jodido desastre. Merecías a una persona mejor que yo... Que se preocupase por ti antes y te entendiera mejor.
- Yo sé que tú me entiendes y me apoyas. Sé que te preocupas por mí. Cuando lloro, quien me consuela? Recuerdas cuando estuve malito, y me preparaste una sopa y me ayudaste a comerla? O cuando me desmayé; quien estuvo siempre a mi lado preocupándose por mi? Yan An, diariamente haces infinidad de cosas por mí y ni siquiera te das cuenta. No quiero vivir sin ti.
- Ni yo, hyung...

Nos besamos apasionadamente y nos tiramos en la cama abrazados. Sin darnos cuenta nos dormimos, y no despertamos hasta el día siguiente.
El hermano de Yeo nos echó la bronca por no salir con él de copas. Dijo que había entrado, y al vernos dormir tan profundamente, no quiso despertarnos. Nos tapó con una mantita, nos quitó las zapatillas, y se fue solo a beber. Mi cuñado era muy buen hombre. A quien saldrían tan buenos los dos?