LXIV

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* Narra Yeo *

Estabamos todos en el aeropuerto. Incluso mis padres y mi hermano. Les presenté a todos, a quienes solo conocían de hablar sobre ellos. No hicieron muchos comentarios, se pasaron la mayor parte del tiempo callados, y eso, a la vez de estresarme, me alegraba. Si no hablaban era por que lo único que tenían que decir no era bueno, pero por lo menos si se callaban no soltaban burradas.
Embarcamos rápido. Todos habíamos volado en avión alguna vez. Estaban todos bastante tranquilos.
Aproximadamente media hora después de nosotros llegaban los padres y la abuela de Yan a Hawaii, así que les esperaríamos en el aeropuerto.
El viaje no se me hizo pesado, fueron alrededor de 10 horas, pero me pasé la mitad del tiempo dormido. Yan An me daba calorcito y caricias.
Cuando llegamos, sentimos instantáneamente el clima agradable. Hacía buen tiempo. No tenía claro que hora era con el cambio de horarios.
La familia de Yan An llegó muy puntual, y juntos nos dirigimos al hotel donde también celebraríamos la boda.
Todavía quedaban dos días para nuestra boda y yo ya temblaba...

Lemon Yan-Gu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora