Capitulo 144

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"Amor, te deje el desayuno listo en la mesa de la cocina y ya le di la mema al gordito antes de irme. Te amo te amo te amo. Peter." 

Leí apenas pude hacer foco en el papel que había encontrado sobre la mesa de luz, sonreí y estire cada musculo de mi cuerpo al tiempo que dejaba salir algunos sonidos extraños. Después de mirar el reloj que marcaba las 10:30 a.m., gire todo mi cuerpo y me abrace a ese chiquito que dormía pacíficamente resguardado por una pila de almohadones de todos los tamaños- a mi lado solo con sus pañales puestos. A la noche se había despertado una vez para pedir aquel liquido que únicamente mi cuerpo podía brindarle, y teniendo en cuenta que Peter lo alimento casi cuatro horas atrás en cualquier momento iba a exigir que mi pecho lo haga nuevamente. Lloró un poquito, pero se calmó al ver que era su mamá la que lo despertaba y con su cabecita apoyada en mi hombro caminé hasta el limite entre la cocina y el comedor donde Peter había colgado una hamaca para bebes, -que pertenecía a Maite cuando era chiquita- con dos sogas elásticas que hacían el efecto rebote que Nico tanto amaba. Lo deje ahí divirtiéndose mientras trataba de hacer tocar sus piecitos con el suelo, y me senté en la mesa de la cocina para no perder de vista a mi hijo, con mi desayuno -ese que me había preparado Peter- y los apuntes que tantas veces había leído y que esperaba que esta sea la ultima.

- ¡Hola, hola! -cruzo la puerta cuando pasaban quince minutos de las dos de la tarde- ¿Que haces ahí vos? -se agacho quedando a la misma altura que Nico y lo hizo rebotar un poquito mas robándole varias carcajadas- ¿Donde esta tu mamá? - como la cocina esta en "L" en dirección a la puerta de entrada, no me había visto sentada detrás de la mesa- ¡Ay boluda me cagué todo! ¡Me asustaste! -giro su cuerpo, después de sentir mi mano en su hombro. Me había acercado sigilosamente-

Lali: ¡¿Como?! -sobreactué- ¡¿A el lo tratas todo tierno y a mi me decís boluda como a una amiga mas?! -mordió su labio inferior- No me mires así Pedro, te lo digo enserio.

Peter: ¿Y que querés que te diga si casi me matas de un susto?

Lali: No se, otra cosa. ¡Soy tu novia, Peter! -como si el no lo supiera-

Peter: Ay mi amor, hermosa de mi alma. -dijo con voz fingida mientras llevaba su mano a su pecho- Tú, la mas bella de todas, ¡me has dado un susto terrible!

Lali: Sos un tarado. -reí y me agache un poquito para besar su boca- ¿Querés que te prepare algo para comer?

Peter: ¿Vos ya almorzaste? -asentí- ¿Te sobró algo?

Lali: Un poco de papas y zanahorias al horno, y pollo. Lo meto al horno y en un ratito está. 

Peter: Dale gracias. - saqué las cosas de la heladera y las acomode en una fuente- ¿Sabes que?

Lali: ¿Que? -metí todo en el horno y lo mire- ¿Que? -repetí-

Peter: Me re gusta volver del trabajo y que estén acá esperandome. -estaba sentado en el piso moviendo a Nico que lo miraba fijamente- Tendría que ser así todos los días. 

 Lali: Bueno ey, todo a su tiempo. -volví a sentarme detrás de esa mesa para empezar a acomodar todo- Hoy te quedas solo con Nico, si cuando vuelvo los dos están vivos y no incendiaron el departamento, nos venimos para acá.

Peter: Que poca confianza me tenés.

Lali: Sos la única persona, además de mi mamá, a la que le permito estar tanto tiempo al cuidado de Nico. -cerré la ultima carpeta y me acerque hasta ellos- Te tengo mas confianza de la que vos pensás.

Peter: convengamos que hace dos meses te pedí que me lo dejes y recién ahora aceptaste.

Lali: ¿Mucho más me vas a reprochar? -estire mis brazos ofreciéndome a levantar a Nico pero ni se inmuto- Ey gordito, vení con mami.

SALVAME (LALITER)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora