Un Amor Inesperado en Invierno

II Temporada Capítulo. 10 Una Inesperada Visita

El ambiente a nuestro alrededor se ha tornado incómodo. La mujer que tuvo el atrevimiento de engañarlo con otro, ha llegado aquí como si nada hubiese ocurrido, y saludarlo con gran descaro.

POV Vegeta

La última vez que vi a ésta mujer le pedí que desapareciera de mi vida. ¿Cómo demonios aparece nuevamente aquí?

―Tiempo sin vernos, Vegeta. ―me dice intentando acercarse.

―¿Qué haces aquí? ―pregunto guardando distancia.

―Bueno, vivo aquí en Houston. Supe que estás trabajando en la NASA, me enorgullece. Sé que nuestra vida juntos se esfumo en un abrir y cerrar de ojos y bueno, pensé que podría venir y aclarar todo sobre ello.

―Creo que fui claro contigo la última vez, quiero que te alejes de mi vida. ―intento seguir mi camino.

―Ahm... disculpa, linda, ¿Será que nos puedes dejar solos? Tu sabes, cosas de parejas. ―le dice a Bulma.

―Ehm... Vegeta voy a buscar a Trunks. ―dice intentando alejarse.

―No. Tú no te vas. ―la tomo de la mano. ―Déjame decirte algo, Kale. Tú y yo hace tiempo dejamos de ser pareja. Y ésta mujer que está aquí a mi lado no se va porque ella es mi mujer.

―Wao... Yo solo quiero recuperar tu amistad, Vegeta. ―agrega.

―Una mujer que fue capaz de engañarme con su amante no puede volverse nuevamente una amistad para mí. Ven, Bulma vamos a buscar a Trunks. ―la ignoramos y seguimos nuestro camino.

―Como quieras Vegeta, si quieres tiempo te lo daré ―agrega.

―Al demonio contigo, Kale. Desaparece ―digo mientras me alejo.

POV Bulma

Vegeta ha manejado la situación de un modo sorprendente hasta incluso me ha tomado de la mano y le ha dicho a ella que yo soy su mujer. Tal vez después de todo lo sigo siendo. El tiempo nos ha ido alejando el uno al otro y solo él sabrá si volvernos a unir.

Buscamos a Trunks y está sobre una nave.

―¡Mami, mírame! ―grita eufórico.

―¡Ey, es grandioso! ―lo miro sonriendo.

―Vuelvo en unos minutos. ―dice Vegeta mientras se aleja por otro pasillo.

―Cariño, ven. Es hora de irnos, luego volvemos. ―Lo ayudo a bajar de la nave.

*Una Hora más tarde*

Vegeta va manejando y tomamos una dirección diferente a la de su apartamento. Nos estacionamos frente a un edificio lujoso.

―Hemos llegado ―dice.

―Vaya ¿Y aquí que hay? ―pregunto.

―Aquí vivirán. Querías un lugar solo para ti y Trunks, pues, aquí es. ―responde.

Subimos al apartamento, saca unas llaves y abre la puerta, Trunks entra corriendo y observa el lugar.

―Aww... Mami, no se ve la ciudad como en la casa de Vegeta. ―me mira con tristeza.

―Cierto, cariño. Es que los ventanales de aquí son más altos. Pero es lindo ―lo animo.

―Si quieres puedo pedir un apartamento que tenga el ventanal completo. ―dice Vegeta.

―No, me parece estupendo. ―observo a mi alrededor. ―Además; no acostumbro a Trunks a complacerlo en todo lo que él quiera. ―agrego.

―Oye, mami ¿podemos ir a comer helado? ―pregunta.

―Cielo, ¿qué te parece en otro momento, si? Vegeta tiene cosas que hacer y no debemos molestarlo. ―acaricio su rostro.

―No es ninguna molestia. Te voy a llevar a un sitio que te gustará, Trunks. ―le dice con un sonrisa ladina.

―¡Si! Mami vamos, vamos... ―me toma de la mano.

―Bueno... ¡está bien, vamos! ― digo convencida.

Mientras, vamos en el auto al lugar donde Vegeta le propuso a Trunks.

―¿A dónde iremos, Vegeta? ―pregunto en voz baja.

―Al Downtown Aquarium ―susurra ―Shh... es una sorpresa.

Vegeta intenta disfrutar con Trunks todo el tiempo perdido, eso me lo ha demostrado y él disfruta estar a su lado. Tal parece que ese amor entre padre e hijo ha sido un amor a primera vista.