En un principio me sorprendió que Dave no mencionara en absoluto lo que había ocurrido entre nosotros en su casa.
Sabía que no había sido un comportamiento normal y sin embargo, ambos continuamos hablando de la misma forma que antes.
Dave no intentó acercarse de esa forma al comenzar el día y ciertamente yo tampoco traté de buscar tanta intimidad con él.
Durante clases, incluso, hablé con él acerca de Jungkook y la última conversación que tuvimos.
-Dale una oportunidad si quieres. A mí me parece que está arrepentido y no sabe cómo volver por ti. Definitivamente esta poniendo excusas para justificar lo que hizo porque sabe que él se tuvo la culpa. Eso es un avance, aunque no lo creas- explicó y mientras tanto, miraba fijamente sus ojos celestes. Estaba confundida y no solamente por el comportamiento de Jungkook, sino también por el de Dave. Hablar de mis relaciones amorosas no le dolía ni un poco.
Después de la forma en que me trató en su casa, pensé que tendríamos que aclarar muchas cosas, pero parecía que él era tan complicado como Jungkook.
Al entrar a la clase de literatura juntos, visualicé a Jungkook.
Sus ojos marrones estaban distraídos en las líneas de un cuaderno donde dibujaba garabatos y en un principio trate de disimular el cosquilleo que me hacía sentir tanta incomodidad, pero luego Dave agregó presión al ambiente.
-Está solo, siéntate con él- me animó con un susurro a mi oído y yo negué.
-Ni de loca- murmuré.
En esa clase ya estaba acostumbrada a hacer pareja con Dave. Me sentía segura de esa forma y no quería cambiarlo. Además, ni siquiera sabía si Jungkook deseaba tenerme cerca.
Aunque nos habíamos besado de nuevo, yo sabía que él cambiaba de humor muy pronto y era impredecible.
-Anda, no seas tonta- refunfuñó su amigo, empujándome duramente al mismo tiempo en que el castaño levantaba la vista para finalmente notar mi presencia en el aula. Nuestras miradas profundizaron un encuentro estremecedor.
Mi corazón latió muy a prisa y temí hacer el ridículo frente a todos cuando Jungkook me rechazara y me dijera que no podía sentarme junto a él.
Sin embargo eso no sucedió.
Durante los tortuosos segundos en los que me acerqué, no dejamos de mirarnos y cuando finalmente estuve de pie ante él, este hizo a un lado los cuadernos que tenía esparcidos por toda la mesa, para darme un espacio ahí.
Me senté en silencio y Jungkook volvió la vista a Dave que le sonrió amigablemente.
Él sabía que todo eso fue obra de su amigo.
-Hola- saludó con un tono suave y enloquecedor.
-Hola- devolví el saludo, bastante nerviosa. Acomodé mi cabello en una coleta mientras Jungkook me miraba y yo rogaba que el rubor no me delatara en esos penosos momentos.
Luego volví la vista a mis libros cuando el profesor entraba a clase. Comenzaba a hablar acerca de un nuevo proyecto pero no podía escucharlo porque tan solo era consciente del sujeto que estaba sentado a mi lado.
Con vista panorámica, lo vi mordisqueando su lapicero y su perfume me volvía loca. Especialmente porque me recordaba al ultimo beso que me había dado. La noche anterior, cuando nos besamos frente a mi casa, fue como si el tiempo pasara volando mientras Jungkook me acariciaba y me entregaba sus labios con tanta pasión. Rememorar su beso era como volver a vivirlo y sentía las mariposas enloqueciendo en mi estomago.
-¿Quieres hacerlo conmigo?- preguntó con un murmullo y lo miré ruborizada al no captar bien sus palabras- Me refiero a la tarea- sonrió.
-Ah si, si claro- balbuceé maldiciendome por haber comenzado mal esa conversación.
Lucía como una estúpida y todo era por él.
ESTÁS LEYENDO
Predestinados
FanfictionUna mirada, una sonrisa, un beso. La historia de la chica a la que el amor y la muerte la persiguen. Esta historia estaba adaptada con personaje masculino a Harry Styles. Todos los créditos a su autora
