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Lia
Zain aún trataba de explicarme todo y yo aún no podía asimilar lo que contaba.
—Solo esto de la diosa y Alma gemela .. — Suspiro algo frustrada — Nadie puede mandar a que quieras a alguien — Niego con la cabeza y el suspira desviando la mirada hacía un punto de la recámara.
— Lía, no puedo dejarte ir de mi lado, simplemente no lo soportaría. Sé que la separación de mates es algo no muy agradable experimentar — Suspira — No me ha sucedido pero me ha tocado presenciarlo — aclara.
Su voz se escuchó afligida y en algún lugar de mi corazón me dolió escucharle. Lo observo desconsertada y trato de levantarme de la cama. Él en un ágil movimiento toma mis manos y me ayuda a levantar.
— Necesito tomar un baño ¿Me dejas sola? — Siento como afloja levemente su agarre de mis manos y se aleja de mi.
— Vendré en unos momentos para ver cómo estás — Asiento y antes de salir por la puerta el gira su rostro una vez conectando miradas, luego de eso el sale y suspiro.
Aunque lo niegue su cercania me pone de los nervios. Aún estoy lo suficientemente aturdida y confundida para lograr entender el efecto que tiene su cercania. Salgo de mis pensamientos y me dirijo al baño.
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Comienzo a bajar las escaleras descalza mientras me encamino hacía la cocina a por algo de comer. Allí encuentro a una chica de espaldas cortando algo, ella gira hacía donde estoy y me muestra una calida sonrisa.
Llevaba el pelo bastante largo trenzado perfectamente en toda su cabeza, sus ojos eran de un gris súper claro casi llegando a un tono blanco, su tez era pálida, estatura media y complexión delgada.
— Hola — Saluda caminando hacía mi y me acerco hasta la isleta de la cocina — Mi nombre es Leilani ¿tú eres?
— Me llamo Lía — Sonrío levemente tratando se sonar amigable.
A la chica se le borro la sonrisa de la cara y sus ojos mostraron nerviosismo, su mano soltó el cuchillo que llevaba empuñado haciéndolo caer al suelo e hizo una reverencia repentina.
— Perdoneme luna mia. No sabía que era usted. Discúlpeme por favor — Su accion me tomo por sorpresa y me acerqué a ella tocando sus hombros.
— No tienes que hacer eso. Levantate — Ella obedeció y dejó de inclinarse aún sin mirarme a los ojos mantuvo su cabeza gacha y sus manos detrás de su espalda — Puedes decirme Lia, nada de Luna.
— No se me permite — Negó.
En esos instantes un chico se acerco a nosotros.
— Leilani — Saludó a la chica y esta levantó la cabeza en forma de saludo — Mi luna — El chico hizo una reverencia hacía mi por unos segundos, luego dio un paso atrás elevando su vista hacía mi — Soy Xander Kolovak, beta de esta manada es un placer oficialmente mi luna.
— Soy Lia ¿Pueden dejar de llamarme luna? Y hacer esas reverencias — El chico río levemente hacía mi direccion negando.
— Zain me ha hablado mucho de tí — Tomó una fruta de la isla ignorando lo que acabe de decir — Hablando de el, me mando a ver como estabas y por lo visto te encuentras mejor. Vamos, te llevaré donde está. Quiere presentarte algunas personas — Me invita a seguir delante, hago lo que dice y luego el llega a mi lado dirigiendonos hacía lo que parece ser el jardin.
Al llegar allí me percaté de la presencia de dos mujeres y Zain. Una se veía bastante joven de pelo lacio de un negro intenso amarrado en una coleta, sus ojos mieles eran grandes y llamativos decorados por frondosas pestañas. Era algo pálida y vestía totalmente de negro. La otra era una señora mayor bastante bonita, con pelo rubio y ojos verdes, vestida elegante con un gran porte y sonrisa agradable.
— Lía — Llama Zain sonriente al darse cuenta de mi presencia me tiende una de sus manos acercandome a él.
Tomamos asiento. Yo cerca de Zain y Xander en un asiento cerca de la chica.
— Te quiero presentar a mi madre, Anne y mi hermana Scarlett — Sonrió señalandolas.
— Es un placer poder al fin conocerte Lia, hemos estado esperando verte con ansias y déjame decir que eres mas hermosa de lo que mi hijo te describió.
Por un momento sentí mis mejillas calentarse y miré hacía otra direccion para que Zain no captara el sonrojo en mi rostro.
— Es un placer conocerla también — Traté de sonreir cortés.
No estaba acostumbrada a relacionarme con personas. Más bien, nunca lo había hecho.
— Oh, yo estaba bastente emocionada de conocerte — Habló scarlett emocionada.
— Bueno Zain y a todo esto ¿Quien está planeando la fiesta para presentar a tu mate a la manada? — Pregunta Anne y yo me removí incomoda en mi asiento.
Estaba un poco confundida y nerviosa a pesar de aparentar que todo estaba bien. Esto de alphas, mates y manadas era un tema confuso para mi aún.
— Nadie madre, aún no he pensado en nada — Zain me miro fijamente y sonrió.
— Pero no esta para menos yo la organizaré, este mismo sábado todos veran la hermosa luna que tendrá esta manada — Toca mis mano de forma cariñosa
— Y obvio tu y yo iremos de compras para ese día — Dice scarlett emocionada mientras no se percataba de la sonrisa que tenía Xander observandola.
— ¿Y tu que me cuentas hijo, ya encontraste a tu alma gemela? — interrumpe la madre de Zain y observó como de pronto a Scarlett se le esfuma la sonrisa. Xander carraspea y mueve su pie izquierdo nervioso.
En eso un hombre corpulento se acerca a donde estamos con cara de pocos amigos.
— ¿Reunion familiar? — Pregunta con una voz ruda, tosca y aspera.
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Quierooo un nombre para el shipp, no se me ocurre nada.
