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Lia
Me remuevo entre las sábanas del lugar donde me encontraba, aspiré el aroma que emanaban y estas olían demasiado bien. Abrí mis ojos y me doy cuenta de donde estoy. Me encontraba en la habitación de Zain, en su cama, cubriéndome con sus sábanas. Un atisbo de sonrisa quiere aparecer en mi rostro y de una vez decido levantarme. Acomodo mi cabello en un moño un poco desprolijo y una silueta capta mi atención.
Veo hacía el ventanal y observo su ancha espalda, sus brazos apoyados del barandal de la terraza y mirando hacía no se que punto. Camino hasta donde está y al abrir las puertas del balcon el frío cala desde mis pies descalzos hasta mi cabeza.
Me abrazo a mi misma dándome calor y de inmediato Zain voltea mirandome fijamente a los ojos. Una sonrisa aparece en sus labios y el brillo llega a sus ojos. Le sonrío devuelta acercandome.
- Hola - Suelta en un susurro y me tiende sus manos para aque me acerque hasta él - ¿Como dormiste?
Lo observo por unos segundos quedando embobada. Su ahora despeinado cabello caía en su frente, tenía una corta barba apenas visible. Sus ojos azules relucían en la oscuridad de la noche y sus labios parecían más rosados de lo habitual.
- Dormí bien, y cómoda. Gracias por llevarme hasta la cama - Digo cuando logro salir de mi ensoñación.
Él sonríe abiertamente.
- Dormiste todo el día, eres una dormilona - Dice sonriente y me atrapa en sus brazos que sorpresivamente tiene una buena temperatura, Se recarga en las barandas de la terraza.
Río leve.
- Necesitaba descansar - Confieso.
- Y no es para menos - dice acariciando levemente mis manos, siento como olfatea mi cabello y gruñe leve pero audible.
- ¡Alpha! - Gritan al otro lado de la puerta. Zain me suelta y me toma de las manos alandome hacía dentro. Abre la puerta y ahí se encuentra con Xander.
- ¿Que ocurre? - dice rápidamente.
- Atacan el ala este de la manda y vienen directo hacía aquí. Mandamos mujeres y niños a la zona segura y su madre y hermana están a salvo igual - dice rápidamente.
Zain se coloca rápidamente una polera negra y se dirije a mí.
- Necesito que vayas con él - dice rápidamente.
- Quédate conmigo - tenía un mal presentimiento, era común en mí ahora.
- Te prometo que volveré sano y salvo. Lo juro, solo quiero que vayas con él y no te separes - Me coloca una manta por encima de los hombros y me toma de las manos - Estaré bien. Te quiero - Besa mi frente.
- No, si en verdad lo haces no me digas eso parece como si te despidieras. Promete me volverás.
- Lo prometo, ahora ve con él.
- Vamos Luna porfavor - pide Xander.
Asiento y me lleva por unas escaleras. Bajamos varios minutos y encontramos una puerta de metal. Coloca un código extraño y la puerta se abrió. Ahí se encontraban varias mujeres y niños, reconocí a Leilani, Anne y a Scarlett. Las dos últimas se hallaban hablando muy preocupadas.
- ¡Lía, cariño! - Exclama Anne y viene directo a abrazarme. Tenía mucho sin sentir ese cariño maternal y ella lo transmitía - Estaba preocupada.
- ¿Que está pasando? Zain se fue y por lo poco que entendí la manada esta siendo atacada - Atrape mi labio entre mis dientes nerviosa y ella me miró tratando de tranquilizarme.
- No te preocupes aquí estaremos bien, Zain volverá y ya verás que todo se va a solucionar.
Por el rabillo del ojo observé a Scarlett y a Xander, él la abrazaba y luego dejó un beso en su frente para marcharse.
