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Lía
Me senté en el sofá que se encontraba de frente al gran ventanal, sin moverme. Aún estaba en estado de shock por lo que me había enterado recientemente. No todos los días las personas se enteran de que tienen poderes irreales y unos de esta magnitud.
Miré al cielo y estaba bastante despejado, sin una nube mientras una ventisca suave entra por la ventana. Llevo mi mano a mi pecho y mi collar no está y ahí es cuando recuerdo que la chica se lo llevó. Un nudo se instala en mi pecho impidiendo que pueda tan siquiera respirar.
Alguien toca la puerta y a los segundos entran en silencio, llegan hasta mí y se sientan a mi lado.
Zain.
— Hola hermosa — Me sonríe y se acerca a mi haciendo que recueste mi frente en su pecho y las lágrimas que hasta ahora tenía retenidas salían sin parar — Ya Bonita, no llores por favor. No me gusta verte llorar — Me levanta y hace que lo mire a los ojos, luego seca mis lágrimas con su dedo y aparta los mechones de mi rostro — ¿Que fue lo que mamá y tu hablaron para que te pongas así?
Niego.
— Me acabo de enterar que soy hija de un semidiós, nieta de un Dios del mar y unos abuelos maternos reyes de los elementos y para agregar una madre milenial — Zain me mira con impresión notable en su rostro — Luego de pensar por más de diez años que mi mamá estaba muerta ahora se supone que esta viva y no soy solo una humana si no que he heredado sus poderes y los de mi padre. Estoy así porque pues, es mucha información que procesar y estoy aturdida.
— Hermosa, ve el lado bueno. Ya sabes que tu madre está viva aunque esté oculta — trata de animarme.
Asiento.
— Seguro ni se acuerda de mi ya. Y tengo miedo de que si nos volvemos a reencontrar no sea lo mismo — Me tendió su pañuelo — También está el hecho de que tengo poderes — Esnifo — ¿Qué me dices de eso? — pregunta y el suspira — Mi vida es un desastre.
— No, no lo es y tu tampoco. No importa lo que seas ni de dónde vengas lo importante es que eres tu y todo eso te hace especial. Ya no llores que no me gusta verte así — Susurra y al final me sonrió con cariño. Me abraza y volvemos a la primera posición, me acomodó en su pecho y sollozo en silencio mientras el pasa las manos por mi cabello.
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Zain
Paso mis manos lentamente por su cabellera risada y me doy cuenta de que se había quedado dormida en mis brazos. La tomo en estilo nupcial y la dejo en la cama donde la despojo de sus zapatos y la cubro. No llevamos un mes y siento como si he vivido y estado con ella toda mi vida. Me enamoré de ella desde el momento que la conocí y tenemos esa conexión porque la siento y se que ella lo siente.
Ahora con todo esto se le ve muy afectada y me duele porque es frágil y no quiero verla así. Quiero verla feliz y sonriente.
Salgo de la recamara y veo a Scarlett salir de la sala de gimnasio sudada y en ropa deportiva muy corta.
— Scarlett — me dirijo a ella y la miro reprobatoriamente — se te ve demasiada piel ¿No crees? — Señalo.
— Hermanito, es ropa de gym — Enarca una de sus cejas.
— Aquí hay muchos chiquillos hormonales y todos pueden verte, no quiero tener que..
— Ya por favor, déjame ser que estoy ocupada para tus escenas de hermanito sobreprotector — Da un beso en mi mejilla y comienza a subir las escaleras.
— Cuando encuentres tu mate veremos si el estará de acuerdo en que uses eso — Le grito y escucho como ríe.
Leilani sale de la cocina y me observa de lejos luego hace reverencia y se acerca.
— Quiero que prepares algo de comer para Lía y que lo lleven a la recamara. No quiero que la despierten y dile a la ama de llaves que esté al pendiente de ella porfavor.
— Si Alpha, Con permiso — Dicho estos se va.
Escucho unos tacones retumbando en lo sólido del lugar y luego de esto una voz increíblemente chillona
— ¡Zain! — Sasha se acerca con un olor demasiado concentrado, un vestido increíblemente corto y unos tacones con una punta tan fina como alfiler.
— ¿Que quieres ahora? — Pregunto con cansancio girando un poco mi cabeza.
— Me preguntaba si querías ir a divertirte hoy en la noche como en los viejos tiempos — Se acercó a mi pasando una mano por mi cuello que rápidamente separé.
— Sasha. Tengo luna, Ya te expliqué anteriormente que lo nuestro solo era hasta encontrar a nuestra pareja, nada de sentimientos.
— No dije que habría solo dije que ...
— Sasha, no es no. Adiós — Taconea fuertemente en el piso y se va furiosa.
