Parte narrada por Nickolas Hansen.
Mientras comemos aquellos deliciosos postres, tenemos una platica divertida, nada parecida a la de hace unos minutos.
—Así que, practicamente usted es un stalker —dice con diversión—. Yo jamás creí eso de usted, señor Nickolas.
Me río.
—Bueno, tampoco es para tanto —murmuro y pruebo otro pastelito—. ¡Mhm! Este es delicioso, me lo quedo.
Ella suelta una risa.
—¿A que hora regresaremos a la oficina? —revisa su reloj de mano—. No es porque me quiera ir ya, sino, porque ya es tarde y en realidad tenemos mucho trabajo...
—Mhm... —termino de comer mi bocado—, no te preocupes por ello. El trabajo puede esperar.
—De acuerdo...
Mi móvil comienza a vibrar en mi bolsillo del pantalón y lo saco enseguida. Veo que es una llamada de Evah y resoplo.
—Disculpa —le digo a Roxanne y respondo—. ¿Qué pasa Evah?
—¿En dónde estás? —pregunta. Esta vez no la escucho molesta, más bien, parece preocupada.
—Comiendo, ¿por qué? —frunzo el ceño—. ¿Pasó algo?
—Sí, Nick... —murmura—. Secuestraron a Victoria y al chofer que iba con ella.
—¿¡Qué estás diciendo!? —frunzo el ceño—. ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Ya pidieron dinero? ¿El chofer es Stephen?
—No sé tanto —dice—, pero creo que aún no piden dinero por ellos y no, no es Stephen, es Gabriel, el nuevo. Escúchame bien; necesito que vayas a casa con mucha precaución y te mantengas allí, aún no sabemos si este ataque va contra la familia.
—De acuerdo, ¿y Valentine? —me preocupo porque a Valentine no le gusta salir con choferes y si está sola en alguna parte, puede correr riesgo.
—No te preocupes, ella está en casa —me aclara—. Envíame tu ubicación y enseguida te envío un escolta para que estés más seguro, por favor, cuídate mucho.
—Sí claro, no te apures. Cualquier cosa que sepas me avisas —miro a Roxanne, se encuentra degustando el pastel que yo había elegido.
—Sí, me marcas cuando llegues a casa —avisa y accedo antes de colgar a su llamada.
—Tengo que irme —menciono—. De verdad lo siento, ha salido algo urgente que luego te explicaré. No puedo quedarme aquí.
—Mhm... De acuerdo —dice sin entender.
Me levanto de mi asiento y me coloco el saco azul que va en juego con mi pantalón.
—Lo lamento —me disculpo de nuevo y saco mi cartera—. Dejaré todo pagado en la caja, no te preocupes.
—Eh, gracias —dice—, pero...
—Te veo mañana Roxanne, no regresaré a la oficina, si quieres tampoco lo hagas tú. Mañana nos pondremos al corriente.
—Uhm... Claro.
—Hasta luego —me despido de ella con una seña y camino hacia la caja para pagar lo que debo.
Cuando salgo del restaurante le envío rápido la ubicación a Evah y unos minutos después veo llegar al escolta, o mejor dicho, a los escoltas.
—Necesito que uno de ustedes use mi auto para llevar a una chica que está dentro —señalo con mi dedo hacia el restaurante.

ESTÁS LEYENDO
JEFE
Teen Fiction"Yo no tenía idea que desde que cambiarían mi puesto en el Grupo Hansen, mi vida daría un giro total. ¿Por qué? Porque me quedé con el jefe más insoportable, gruñón, amargado y engreído que jamás había tenido. Y de quién jamás pensé enamorarme." →Ba...