Parte narrada por Roxanne Bennet.
Luego de ir a entregar la silla de ruedas para el señor Henrik y los miles agradecimientos de su esposa hacia nosotros, estamos de vuelta en la empresa.
—Roxanne, muchas gracias por la ayuda que me estás dando —su mirada es sincera y realmente creo que está agradecido. Se mueve un poco en la silla y sonríe—. No sé cómo pagarte lo que estás haciendo. Dímelo, ¿qué puedo hacer? Ya sé que no quieres dinero, ni cosas materiales, pero, ¿entonces cómo te pago?
Con amor.
Loca conciencia, estás loca.
—No tiene que hacer nada —murmuro con media sonrisa—. Me gusta ayudar.
—Pero, Roxanne...
—Pero nada —le insisto—. Usted es un terco.
Suelta una risita.
—Es que me siento mal porque no puedo regresarte lo que tú me das... Quiero decir, la ayuda que tú me das —habla, me mira fijamente y creo que no piensa siquiera despegar su vista de mí.
—¿Sabe cómo puede hacerlo? —me acomodo en la silla de su oficina y me cruzo de brazos. Él se recarga en el escritorio para poner más atención—. Dándome regalos que no tengan precio.
Dicho esto, él frunce el ceño sin entender.
—¿A qué te refieres? —se echa hacia atrás en su silla.
Alzo mis hombros y sonrío.
—Sólo analícelo —le dedico una última sonrisa y me levanto de la silla para salir de su oficina.
Afuera, veo que Caroline se encuentra conversando con un chico que está sentado a su lado en el escritorio, obviamente, usando mi silla.
El chico es guapo, de piel blanca y ojos azules claros. Parece un buen chico para Caroline...
Oh por Dios.
Veo debajo del escritorio y él, poco a poco comienza a subir su mano por debajo del vestido de Caroline, mientras ella se ríe y lo disfruta.
¿Qué rayos le sucede?
—Caroline —me acerco a ellos interrumpiendo su erótico momento—, eh... Necesito mi silla.
—Ah, claro —el chico se pone de pie y coloca mi silla frente a mi escritorio—. Lo siento.
—Rox, él es Gian —lo presenta—, y Gian, ella es mi mejor amiga Roxanne.
—Hola —sonríe en mi dirección. Le devuelvo la sonrisa y veo que comienza a despedirse de Caroline. Luego de unos minutos termina lléndose de nuestro lado.
—Me encanta —Caroline suspira y termina mordiendo su labio inferior.
—Los ví, descarada —murmuro entredientes—. ¡No pueden estar haciendo eso aquí! ¿Qué tal si Nickolas sale y te ve? ¡Peor aún! ¡Que tu jefa te vea!
—Ay, Rox —dice relajada—. Tranquilízate, nadie nos vió.
—Pero pudieron hacerlo.
—¡No te imaginas lo bien que la paso con Gian! —deja salir otro suspiro—. Lo hicimos en el baño —susurra para que nadie más la escuche.
—¿¡Es real!? —me espanto—. ¡Qué asco, Caroline!
—¡Cierra la boca! —me hace hablar más bajo.
—¿Aquí? ¿Hablas en serio? —comienzo a susurrar y voy por mi silla para colocarla frente al escritorio de Caroline.
—¡Sí! Lo hace increíble en cualquier lugar —su cara demuestra la excitación que siente, se muerde el labio inferior y yo pongo una cara extraña.

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JEFE
Teen Fiction"Yo no tenía idea que desde que cambiarían mi puesto en el Grupo Hansen, mi vida daría un giro total. ¿Por qué? Porque me quedé con el jefe más insoportable, gruñón, amargado y engreído que jamás había tenido. Y de quién jamás pensé enamorarme." →Ba...