Capítulo 48

4.8K 383 97
                                    

Reescrito.

Un buen rato había pasado de "No quiero a esa mujer" esas fueron las declaraciones de Greyson quien con un par de palabras más dejo en claro que se sintió completamente ofendido, Elliot no lo tomo personal pero aún así decidido retirarse para no causar otra molestia, había importunado a los anfitriones, sobre todo a la pequeña prometida...

Honey no podía ni tratandoo de explicar lo exasperada y hastiada que se siente en este momento.

Fue Greyson quien negó a esa mujer, fue su decisión y su voluntad ¿Por qué murmuran entre sus propios invitados que fue por ella, que rechazo a la mujer porque la ofendería?

¿Nadie entiende que le da un poco de igual y un poco de alegría? Le daría más alegría si la hubiese conservado.

— Generalmente las parejas no son infieles, querida.— le explico una amable mujer, de esas que abundan en esta infernal noche.— Pero los hombres tienen deseos y si no puedes saciarlos es mejor que alguien más lo haga. Podrías hasta lastimarte si no estas preparada.— le advirtió.— Eres tan pequeña, oí que estas estudiando para el papel de esposa...no te esfuerces mucho.

Los estudios son para distraerla, si continuaba mirando las paredes de su cuarto o al personal de la mansión enloquecería.

— Quisiera estar sola.— pidió retenido lo ultimo de su paciencia.

— No te lo tomes tan a pecho, es tu fiesta...no dejes que esto te afecte.— la señora tomo el atrevimiento de acercar su mano a ella pero se arrepintió al tener contacto con la piel inerte de Honey, sobre todo por la mirada que le dedico.

Quiero estar sola.— exigió.

La vampira no dudo en retirarse, no requirió un tercer aviso y mejor así; con la paciencia que le queda Honey le hubiese aventando la mesa. Suspiro profundamente tomando su cabeza, palpita como el sonido de un reloj explosivo, es así como se siente; a nada de explotar.

Sabia desde que Greyson le dijo de la fiesta que entraría entre sus noches más pesadas —top 10— entre conocerlo a él y cinco de sus peores momentos juntos.

Solo dos horas van...

— ¿Desea algo de tomar? — Un chico se acerco a ella extendiendo una bandeja con copas.

— Si.— susurro como si estuviera respirando luego de un largo tiempo; tomo toda la bandeja repleta y luego de asegurarla en su mesa agarro la primera copa.

— No era necesario su ayuda, señora, yo puedo...

— Señorita.— aclaro acabándose la primera.— Y no te ayudo, beberé todo esto; busca otra bandeja.

El chico apretó los labios con desconfianza, sin embargo no se atrevió a cuestionarla.

— Como usted desee.— murmuro para retirarse.

Honey tomo su segunda copa con la misma rapidez que la primera, nunca se ha sentido muy atraída al alcohol a diferencia de los gemelos...Axel es fanático de las sensaciones fuertes y Alister de los diferentes sabores. Ambos aún teniendo como siempre diferentes puntos de vista le enseñaron mucho de las bebidas, beber con ellos era agradable...incluso cuando Lucian los detenía y se desataba un desacuerdo.

Soltó la copa con fuerza regañándose a si misma, no era momento para irse por esos pensamientos.

Mira lo que hace...— un susurro llego a sus oídos.— El líder Grugnon no debió hacer eso en frente de todos, pobre niña.

— Debería ser madura, es una práctica algo antigua pero es lógico entorno a...las inclinaciones del líder.

— Si, además, que poca dignidad tiene...que importa que tenga una humana para follar, ella será su esposa, es la hija de Infamius Moore.

Honey Sei. ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora