Capítulo 01.

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Reescrito.

Se volvió cada vez más superficial la respiración a cada paso que debía hacerse sobre el escenario; punta, estirar, saltar y girar, dos veces esa secuencia luego un desplace y otro salto. La música cambia de ritmo y eso significa que los tiempos ya no son los mismos y luego, y luego...

¡Pam!

Aquella torpe chica se había caído...otra vez.

— Lo s-siento! — se apresuró a decir. — Lo haré de nuevo...s-solo...

— No fuerces tu cuerpo— pidió una apacible voz desde los asientos de la tarima donde aquella chica y otras más practican. — Es completamente inútil, no has sido capaz de recordar los últimos tiempos.— sentencio la voz y tras un suspiro la pequeña chica de cabello negro se levanto en busca de su termo.— Estas fuera de la presentación.— sentencio de pronto.

— ¿Qué?— La chica seguía en el suelo y para sumarle a su apariencia completamente patética dejó que sus ojos se llenaran de gotas rojizas, gotas de sangre, aquella vampira llora. — ¡La presentación es esta noche! No puedes quitarme...s-soy la segunda principal.

— Eras.— corrigió la azabache encontrando su termo con sangre, aunque solo se hallaba viendo en un rato le tocaría subir para ensayar su propio baile y debía tener fuerzas. — Tu eres la suplente ¿No? — la azabache se dirigió a otra vampira, una pelirroja, de apariencia joven, como de su edad, veinte años. — Toma su lugar y sigam...

— ¡Dame otra oportunidad! Te juro que...— la torpe vampira se levantó finalmente del suelo pero quizás debió quedarse allí ya que...la vacía y oscura mirada púrpura de Honey no fue normal.

Honey no era alguien expresiva, aún con su apariencia de muñeca que la caracteriza junto a su cabellera negra y sus mencionados ojos púrpura sin alguna emoción dentro de ellos. Todo, enmarcado con un aura oscura y siniestra casi natural que actúa como una segunda piel que va acorde con ella, así es ella, muchas de las presentes conocían a Honey Blood Moore desde hace años y contadas la han visto sonreír, amargarse, enojarse...lo más que hacia era mover las cejas; fruncir el entrecejo moviendo las cejas en el proceso o la más aterradora y común era que ella levantara una ceja.

Justamente había hecho eso.

— Tus palabras salieron con desespero...como...una humana. — susurro manteniendo su ceja levantada cuestionando completamente aquella castaña y patética vampira. — ¿Acaso eres eso que tanto alegas no ser? Corrijo, que dices ser superior...

— Honey, por favor habrá muchos vampiros esta noche y...

— No es mi problema.— masculló ubicándose en otro lugar de la tarima donde se lleva a cabo el ensayo.

La tarima estaba ubicada en el parque y por ello el frío clima podría ser responsable de los escalofríos que algunas tenían...o quizás era por Honey.

— ¿No crees que deberías pensarlo mejor antes de tomar una decisión drástica? — aconsejo Taurina, era la de apariencia más mayor en el grupo de baile y Honey la había elegido como la principal para la pieza que ensayan. Por los momentos descansaba en uno de los asientos como ella ya que la parte que practicaban no aparecía.

— Llevamos una hora sin poder avanzar de esta parte. — argumento Honey bebiendo.

— Es esta noche la presentación.— Taurina hizo hincapié en eso. — La suplente podría causarte más problemas que ella.

Honey Sei. ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora