Amenaza.

1K 80 11
                                    

EMILIO.

Un mensaje hizo que me despertara. Abrí los ojos y busqué el celular. Lo prendí y abrí el mensaje.

Te doy tres días antes de morir. Suerte. =)

¿Qué demonios? Mi cuerpo comenzó a temblar. No de nuevo, no. Marqué a Joseph.

-Joseph ven, por favor ven - sentí que me faltaba el aire.

-Tranquilo, voy enseguida.

Colgó y me quedé observando mi alrededor. ¿Por qué yo? No entendía. No entendía nada.

..........

Llegó Joseph y fuimos hasta mi cuarto.

-¿Qué sucedió?

-Alguien me envió un mensaje - le mostré el celular - me amenazó.

-Esto concuerda.

-¿Qué dices?

-Los celulares de los otros dos no los pudimos encontrar. Mira, quedate tranquilo, pediré que te protejan.

-Gracias.

-Emilio, estás pálido.

-Es que, no sé. - Quería llorar.

Joseph me abrazó. Sentí un poco de calma. Lo abracé también hundiendo mi rostro en su pecho.

-Dime que no te vas a ir - le dije.

-Emilio, claro que no, pero te noto más temeroso, digo, con Joshua no fue así.

-Joseph, me están amenazando directamente, hay dos cadáveres…

-Entiendo. Está bien, tranquilo, ahora podré protegerlos mejor.

-¿Protegerlos?

-Supongo que si te quieren a ti, también querrán a Joaquín.

-Si, es verdad.

Joseph se quedaría conmigo esta noche. Así por lo menos me sentiría más protegido.

-Lo siento por molestarte - dije.

-No te preocupes . Me interesas y quiero que estés bien.

Joseph agarró su teléfono y comenzó a enviar mensajes.

-¿Con quién hablas? - pregunté mientras acomodaba la cama.

-Estoy viendo si Joaquín está bien.

-Quizá no te contesté por la hora.

-Lo sé, pero cuando se despierte verá mi mensaje.

-Ya veo.

Termine de acomodar y le indiqué que podía acostarse.

-Lo siento, no tengo dónde puedes dormir.

-Puedo dormir en el sillón - dijo.

-Claro que no. Solo será una noche.

-Una madrugada más bien. - Sonrió

-Es verdad.

Me acosté seguido de Joseph. Apagué las luces y cerré los ojos.

-Que descanses - dije.

-Igualmente Emilio.

JOAQUÍN.

En la mañana vi el mensaje de Joseph. Cuando le contesté me explicó todo lo que había sucedido. Ambos teníamos que tener mucha precaución.

Confusión. (Emiliaco) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora