Capítulo 35

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¡YA LLEGÓ SU AZÚCAR, AMARGADOS! 😂😂

Max se detuvo frente al lugar donde ella le dijo que estaba y se bajó de inmediato mientras su celular sonaba y sonaba

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Max se detuvo frente al lugar donde ella le dijo que estaba y se bajó de inmediato mientras su celular sonaba y sonaba.

   Se adentró en el callejón y la encontró hecha una bola en el piso sosteniendo fuerte algo en la mano.

—¿Margot? —preguntó mirando alrededor—. Soy yo, Max.

   Ella se puso de pie y se acercó a él para lanzarse a sus brazos mientras se daba la oportunidad de llorar por fin y mostrarse como lo que en ese momento era: una chica aterrada ante la solo idea de haber pasado lo peor que podía vivir una mujer.

   Max no dijo nada, dejó que se calmara mientras la sujetaba y daba palabras de consuelo.

   No sabía lo que le había pasado, cuando le llamó solo estaba alterada y él no dudó en ayudarla pero desconocía lo que había pasado.

   Dejó que se calmara antes de hablar.

—¿Qué es lo que ha pasado? —preguntó sosteniendo la mano de la chica—. Ven vamos al auto.

   La guió hacia su auto mientras la veía temblar y con el rostro enrojecido.

—¿Quieres que llame a tu familia? ¿Necesitas un médico? ¡Por Dios, dime algo! —dijo exasperado.

—¿Quién es August? —preguntó mirando a Max—. ¿De dónde lo conoces y por qué te odia tanto?

    Se soltó a llorar de nuevo mientras Max observaba sin poder entender lo que pasaba y más cuando su corazón comenzó a latir más fuerte de solo imaginar que le hubiera hecho daño.

   Prestó atención entonces a su cuerpo, las marcas en sus brazos dejaba claro que le había hecho daño, aunado al rojizo de su mejilla que indicaba el próximo moretón a formarse.

   La miró sin hablar durante varios segundos antes de que ella volviera a hablar.

—Fue a mi trabajo —dijo mientras hipaba—. Me dijo que no había nada que te doliera más que saber que él disfrutó algo que es tuyo, o algo así.

   Se soltó de nuevo a llorar mientras Maximilian apretaba los dientes completamente furioso de escucharla y de saber que el infeliz estaba tras ella solo buscando la oportunidad de hacerle daño.

—Es mi padrastro —dijo después de un rato—. Un infeliz que ha querido hacerme daño toda la vida y sigo sin comprender el porqué.

    La joven le miró con sus ojos completamente rojos por el llanto antes de que Max la tomara del rostro y limpiará sus lágrimas.

—Voy a llevarte con un amigo —dijo y ella asintió—. Necesito que te revise.

—No es nada —dijo y él negó.

SEDUCIR AL MONSTRUO (SERIE EL CLUB DE LOS DESTERRADOS 3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora