Capítulo 47

50.3K 5K 747
                                    

La mujer miró a Max durante unos segundos antes de sonreírle

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La mujer miró a Max durante unos segundos antes de sonreírle.

—Me da gusto verte al fin —dijo mientras él fruncía el ceño.

—¿Quién diablos eres? —dijo este con el entrecejo fruncido esperando lo peor.

—Soy Volga Twain tía de Jane y… —Extendió un papel hacia Max—. Tutora legal de Maximilian.

   Maddox arrebató el papel de inmediato y comenzó a leer de forma detenida antes de que Max lo mirara con ojos muy abiertos buscando algo que dijera.

—El niño tiene mi apellido y soy su padre —dijo asustado—. No vas a quitármelo.

—Eso es lo que ella te hizo creer —respondió la mujer—. En cualquier caso este documento invalida tu función como tutor así que exijo que me entregues al niño ahora mismo. Soy la única familia del lado materno y tengo una carta que ella me dejó pidiendo que me quedara con el niño.

—Eso es mentira y no voy a darte nada —dijo Max apretando los dientes—. El niño es mi hijo y va a quedarse conmigo.

—Bien, volveré entonces con la policía pero de que me lo llevo me lo llevo —dijo dándose la vuelta y saliendo de ahí sin más.

   Max de inmediato tomó su celular para llamar a su abogado que dijo no estar en la ciudad pero que llevara el documento a su despacho.

   Miró a Maddox buscando ayuda.

  Este le dijo que se encargaría de ello y salió de ahí prometiendo una respuesta por la noche.

   Aún era temprano, la hora de la comida, pero Max se sentía asfixiado de solo imaginar que en cualquier momento pedirían que entregara al niño.

—Tranquilo —dijo Hurs—. Algo se le ocurrirá a Maddox.

—No es su área —dijo Max.

—Hombre que poca fe —dijo Parker—. Algo hará, es abogado después de todo. Está bien que sea medio bruto pero no lo subestimes.

   Max sonrió nervioso sabiendo que trataban de relajarlo y esperó horas antes de que la noche llegara mientras escuchaba a sus amigos con infructuosos intentos de mantenerlo contento.

   Cuando la espera fue insuficiente y Melina llegó con los niños para llevarlos a casa de Maddox tuvo que mostrar una cara amable.

    Los niños jugaban y gritaban mientras corrían por el casino.

  El pequeño de Melina gritaba frustrado de no poder seguir el ritmo de los mayores y se acercaba a Parker llorando.

   Vio a Parker consolarlo y levantarse para dedicarle tiempo mientras miraba a Hurs que le decía alguna tontería al pequeño Will para hacerlo reír y alejarlo de Parker alegando que era mala influencia.

SEDUCIR AL MONSTRUO (SERIE EL CLUB DE LOS DESTERRADOS 3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora