Sin mis alas (Freddedy)

Veintitrés

— ¿Mis ojos? — ahora sí estaba nervioso —.

— Sí, mira yo sé que es difícil vivir con Demián pero no tienes que preocuparte, no te va a pasar nada, te lo prometo.

Fred estaba confundido, era obvio que Freddy pensaba que él estaba enfermo y no sabía sí corregirlo o dejar que pensara lo que deseara.

— Freddy. — Se decidió a hablar Fred —.

— Hey Fred. — habló una voz conocida, y fastidiosa, Gam había aparecido detrás de Fred y miraba en la dirección opuesta, como si buscara algo, no había visto a Fred —, Escuche por ahí que una mujer se acaba de confesar y está a punto de morir deberíamos ir y...

Gam giró su cabeza y vio a Freddy con los ojos abiertos y las cejas juntas.

Fred miraba el suelo, quería que se lo tragara la tierra, pero sabía que eso no pasaría.

— Eso es... — comenzó Freddy apuntando al rosado —, Eres un...

— ¿Demonio? — preguntó casi sarcástico Gam —.