Sesenta y cuatro

980 129 8
                                    

Freddy estaba en casa, preparaba sandwiches para llevarlos al estanque, por qué, ahora que lo pensaba jamás había visto comer nada a Fred, y no es como que no pudieran comer estas cosas.

Su madre entró a la cocina, curiosa de lo que hacía su hijo, lo veía muy contento; — Freddy.

El mencionado giro la cabeza sin dejar de sacar panes de la bolsa; — ¿Sí mamá?

— Tuve un sueño.

Freddy se detuvo por un momento, quizá había remediado las cosas,y el sueño que tuvo su madre fue para avisarles que había logrado su objetivo, quizá ya todo estaba bien y podrían regresar todos al cielo.

La idea lo aterró.

— ¿Y qué tal? — preguntó con una sonrisa.

— Todo está mal. Parece que hiciste algo malo. ¿Crees saber qué es? ¿Podrás remediarlo?

Todo era confusión para el pequeño, pero no quería preocupar a su madre, ella realmente no merecía estar en la tierra cuidando del castaño; — Creo qué se que es. No te preocupes, lo resolvere.

La mujer sonrió cansada y asintió.

Sin mis alas (Freddedy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora