Capítulo 45

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Retrocedo un poco ante la sorpresa y examino de pies a cabeza a la persona que tengo delante. Es alto, hombros anchos y de contextura delgada, tiene el pelo corto y es rubio. Lleva un abrigo largo encima acompañado de unos pantalones y una camiseta azul oscura, él me mira de una forma extraña tanto así que llega a erizarme la piel y sus ojos...

— Dime que no estoy viendo doble.

Es igual a él. 

La misma estatura, nariz, ojos...Todo es igual a él y estoy demasiado confundida con la presencia de su hermano que me cuesta pronunciar algo con sentido. ¿Por qué no me dijo que tenía un gemelo?

Siento la mano de Strom en mi cintura, me acerca más a su cuerpo pero eso no consigue que mis ojos se aparten del otro rubio.

— No, tus ojos están muy bien.— las palabras salen con un poco de brusquedad de su boca, siento su aliento cálido en mi oreja— Te lo explicaré después, ve a casa y espera por mi, por favor.

Suspiro y me abrazo a mi misma mientras asiento, aquí podía percibir un ambiente que no es para nada el mismo que teníamos Kai y yo, se podía apreciar que su hermandad era muy distinta a la nuestra y no iba a meterme ahí. Aparto por fin mi mirada del otro rubio y me centro en Strom, asiento ante su petición y me despido de él sin ningún beso de por medio ya que de alguna forma me sentía extraña con su hermano delante.

Antes de irme, me fijo otra vez en su gemelo que sigue mirándome pero ahora tiene el ceño fruncido.

¿Qué coño pasaba aquí? 

Un poco aturdida, camino en dirección a mi coche que para mala suerte se encontraba unos cuantos pasos detrás de aquel desconocido. Mis pasos parecen los de una tortuga asustada más aún cuando al intentar pasar por su lado, su mano se cierra sobre una de mis muñecas tomándome por sorpresa e impidiendo que me vaya.

— Hola, Jinx.

Mi respiración se queda en el aire, mis ojos se abren de par en par ante la sorpresa y elevo la mirada hacia él, es tan alto que solo hace que quiera irme de allí. Intento quitar sus manos pero su agarre permanece firme como si no quisiera dejarme ir.

—¡Suéltala!

—No sé lo que él te dijo porque no hablo español pero me alegra mucho verte.

— ¿Quién eres?— susurro.

— ¡Te he dicho que la sueltes!— Strom empuja el cuerpo de su hermano lejos de mi y empieza a decir cosas que no consigo entender.

— Para de hablar, ¿no ves que no te entiende? Utilicemos el inglés, es injusto que ella se pierda esta conversación.

—Vete al infierno.

— Es ahí donde te van a mandar dentro de poco.

Pongo una mano sobre el pecho de Strom cuando veo como intenta acercar su puño al rostro de su gemelo. El otro niega un par de veces en nuestra dirección, no sé de qué va todo esto pero no puedo dejarlos solos con estas actitudes porque podrían matarse en cualquier momento. Intento tranquilizar al alemán para después dirigir mi mirada a la de su hermano.

— Mira, no sé quién eres pero...

—Digamos que de momento puedes llamarme Blitz.

¿Pero qué...?

Mi cuerpo retrocede un par de pasos ante aquellas palabras.

— Como no cierres la puta boca te la cerraré yo.— escucho a lo lejos.

Sin darme cuenta acabo haciéndome a un lado para procesar cada una de las palabras que el hermano de Strom a soltado sin miramiento. Mi mente viaja al pasado y cierro los ojos mientras los recuerdos arrasan con la poca cordura que me estaba quedando ahora mismo.   Tengo miles de pensamientos en la cabeza y ninguna de ellas son buenas, me llevo las manos hacia el rostro con frustración, puedo escuchar los gritos de los hermanos Ackermann y sin importarme que alguien pudiera aparecer por ese estacionamiento suelto un grito casi desgarrador.

— ¿Quién eres?

—Jinx, hablemos...— la mano de Strom me detiene en mi camino hasta su hermano.

—¡Que me sueltes! — exclamo con rabia, sus manos tiemblan debido a la impresión— Te juro que si...

—Por favor, habla conmigo. Te lo explicaré todo.— me dice casi desesperado.

—Ella debería saber la verdad.

—¿De qué verdad hablas?

—¡Cállate!— le dice Strom a su hermano e ignorando mi petición anterior me quita la gorra de la cabeza y acuna mi rostro entre sus manos, algo va mal aquí— Jinx, cariño, tú sabes que yo te quiero, ¿verdad?

Los murmuros en alemán se escuchan a nuestras espaldas y cuando por fin el que se hace llamar Blitz decide hablar, mi corazón se paraliza ante la sorpresa de sus palabras.

«No puede ser cierto.»

—Es un farsante de mierda. Todo este tiempo ha jugado contigo haciéndose pasar por mi. Yo soy aquel chico con el que hablaste por primera vez Jinx.— su semblante ha cambiado, parece dolido y duda en acercarse hacia mi— Soy Blitz, soy aquel chico de 20 años con el que te cruzaste en aquella aplicación y no sabes cuánto me ha costado encontrarte.

Mis ojos se nublan ante semejante confesión, las lágrimas que amenazan con salir buscan una explicación en los ojos de Strom, algo que me diga que todo se trataba de una broma pero no, lo único que encuentro es culpa y remordimiento en ellos y es ahí cuando me doy cuenta de lo ingenua que he sido durante todo este tiempo.

Ahora entendía todo, lo extraño que se ponía cada vez que le llamaba Blitz y me pedía que no lo hiciera, lo confuso que parecía ante algunas cosas que yo ya daba por hecho que él las sabía, su forma de ser...El Blitz que yo conocía era muy extrovertido y a Strom penas y se le escapaban sonrisas, era mucho más discreto y se mostraba distante frente a los demás. Debí suponer desde un principio que no se trataba de la misma persona pero, ¿quién iba a decirme que se trataba de un impostor y que se reiría de mi en mi cara?

Exacto. Nadie.

— Qué ingenua he sido.— digo sintiendo las lágrimas rodar por mis mejillas— ¿Por qué hiciste todo esto?

—Déjame explicarte, te juro que...— niego repetidas veces y lloro cuando acerca su frente hacia la mía— Yo te quiero, Jinx.

Cierro los ojos con fuerza, sus palabras lo único que consiguen es herirme aún más, llevo una mano hasta mi pecho y me alejo por milésima vez de él. Su toque antes me quemaba la piel de una forma placentera y ahora lo único que sentía era repugnancia.

«Maldito mentiroso.»



✨✨✨

¿Os lo esperabais? Solo vi que dos personitas acertaron en esto. (manifestaros!)

¿Por qué Strom hizo semejante bajeza?

El capítulo era más largo pero por problemas de wifi solo pude subir esto. Subiré la otra parte a penas pueda.


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Cuidado con el alemán #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora