Prefería no destacar el hecho de que el regreso de Hoseok no fue como lo esperaba. Tantas horas en las cuales lo llegaba a extrañar en otras ocasiones, esperando anhelante su presencia la cual solo se ausenciaba en periodos más cortos al de un mes; en cambio se pasó el tiempo muy rápido al vivir todo ese mes al lado de Jungkook, el cual a pesar de no ser tan extrovertido como su novio, por obvias razónes, había causado una curiosidad en él, ya que todas las veces en las cuales llegaba a intercambiar opiniones triviales, se daba cuenta de que aunque fuese demasiado delicado, tuvo una vida, un diferente modo de pensar al suyo.
Parecía un ángel, pero al pasar sus días al lado de ese chico, se daba cuenta de que era real, pudo sentirlo desde la vez en que el propio había buscado más allá que un tacto en sus brazos, un consuelo y reconfortación demostrando su lado temeroso, y lejos de mostrarse débil, le dió alas para saber que más adelante podría hacer que ese pequeño pelinegro pudiera vivir fuera de esos hechos traumantes que le formaron con esa conducta. A pesar de todas esas dificultades que tenía para sobrellevar a la sociedad o la seguridad, miraba las grandes capacidades que tenía al concentrarse tanto en algo que le apasionara, como la música. Sin duda le había impresionado aquella noche, en cambio no tuvo la oportunidad de escuchar su voz cantar, cosa que de cierta forma le hizo sentir una curiosidad superficial respecto al como sería escuchar su voz, la autenticidad que le proporcionaba a cada ser humano con esas ondas sonoras que podían a llegar a crear arte.
No podía retroceder el tiempo y las cirscunstancias en las cuales le conoció habían sucedido por algo. Seguiría con esa idea en su mente, de ayudarlo porque se lo prometió.--¿Entonces qué dices Tae?--. Preguntó a su lado Hoseok, sacándolo de sus pensamientos, y del mismo modo su visión de la carretera mientras conducía a la casa de su novio.
--Lo siento no escuché bien--. Se disculpó con sinceridad, mientras miraba la bien reconocida casa de Hoseok. Estacionando el auto.
--¡Taehyung!--. Hizo un puchero mientras se colgaba de su brazo. --Digo que si te parece que mañana sálgamos, necesito comprar una nueva laptop, la mía ya no sirve; además así aprovechamos las vacaciones--. Le sonrió deslumbrante, como solía hacerlo siempre y lograba que Taehyung se derritiera de amor; en cambio no supo si debido al cansancio o a algún otro factor, en ese instante lo vió un acto lindo, tan acostumbrado que no fue como la primera vez que miró esa sonrisa que lo enamoró y provocó que sintiera ese anhelo por tenerlo cada segundo en sus brazos.
Se limitó a sonreírle del mismo modo, y con un asentimiento de cabeza aceptó las propuestas de su chico. Observando la emoción del contrario.--Gracias Tae--. Se acercó a él para apretarle una mejilla de manera afectuosa --Entonces mañana vienes por mí--. Se acercó más a Taehyung, quien cerró los ojos en el momento en el cual Hoseok besó sus labios con cierta alegría y emoción. Al poco tiempo Taehyung le respondía con la misma potencia del contrario; un beso húmedo en el cual ambos se unían. Taehyung le cogió de las mejillas, acercándolo más a él, mientras el contrario no se quedaba atrás y en cambio subió sus manos hasta su cabeza, enrollando los dedos en el cabello castaño.
Taehyung estaba algo cansado y por ello supo cuando detener a su novio; ya que pronto Hoseok bajó una de sus manos entre el beso a su abdómen, bajando cada vez más abajo de lo permitido por ello se separó del beso y le acarició la mejilla. Hoseok sabía que significaba ello, por eso solo se limitó a sonreírle sabiendo que ya era tarde y que podían tener intimidad en otra ocasión; después de todo aún quedaban algunos días para aprovechar todo lo que pudieran hacer juntos.
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La Voz Del Alma (Vkook)
FanfictionJungkook ha sufrido de todas las maneras posibles desde su infancia, y una de las consecuencias de esto es haber perdido la voz... «Lo siento mamá, tal vez no podré cumplir tu promesa, no creo poder seguir adelante». Pensó Jungkook abrazando la cade...