♤ Cuarenta y Nueve ♤

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Este capitulo esta dedicado a c_on_i -Namjini- Wawa! espero que disfrutes y te distraiga un poquito de todo. Te adoro, lo sabes no?

-Canción mencionada en el capítulo será dejada abajo-

🐾🐾

El aroma del caldo de pollo llenaba la pequeña estancia. Holly daba saltitos, intentado hacer gracias para recibir algo de lo que olía de forma tan buena.

-No, no jovencito. Tu tienes tu comida, déjanos esta a nosotros. -Eunha le dijo apuntando al cachorro con la cuchara de madera. Yoongi volvió la cabeza para mirar la tierna escena -La comida ya va a estar lista, Yoongi.

El omega asintió. Miró por ultima vez hacia afuera, donde otra noche lluviosa reducía Seúl a una postal llena de colores desenfocados en gotas cristalinas.

Jimin...

Debes recuperarte, Jimin...

-Yoongi...-Eunha volvió a llamarlo, llevando la comida a la pequeña mesa.

-Esto huele muy bien Eunha. -le dijo en tanto caminaba los pocos pasos y tomaba asiento. El omega se esforzó por formar una sonrisa, pero el gesto no llegó a sus ojos. La mujer le observó y sonrió mínimamente.

¿Así se siente cuando sonríes para hacer sentir bien a los demás?

Yoongi se cuestionó cuando se encontró haciendo aquello por lo que recriminaba a su novio, obligarse a sonreír aun cuando no sintiera verdaderas razones para hacerlo.

Comieron en silencio, cada uno absorto en sus propios pensamientos, sin saber que no escapaban mucho de diferir. Ambos sintiendo diferentes tipos de pesar hacia Jimin.

Era el día catorce del alfa en el hospital. Eunha estaba en casa de Yoongi hace seis. Era cómodo, aunque cuando quería llorar contra la almohada, demasiado avergonzado, solía encerrarse en el baño, intentando hacer el menor ruido posible, ahogando los sollozos contra una toalla.

Aunque los ojos hinchados y la nariz sonrosada lo delataban automáticamente.

En la escuela, Yoongi era un muerto viviente. Apenas si prestaba atención, sin embargo, su responsabilidad con su beca y a quienes les enseñaba, no decaía.

Hoseok supo que algo no estaba bien, pero decidió darle el espacio suficiente para que hablara con él cuando estuviera listo. Solo se limitó a acompañarlo, quizás no había grandes conversaciones, pero eso no le impedía hacer lo posible por seguir a su lado. Y así, el grupo que siempre se sentaba junto a la hora de almuerzo, no dejaban a Yoongi, quien se mostraba extrañamente vulnerable esos días. Incluso cuando alguien se metía con él, no respondía, sus ojos sin brillo no se molestaban en dar más de dos miradas al resto.

Extrañas notas habían aparecido en el casillero del omega, siendo aquella amenaza luego de su cita con Jimin, la primera. Estas notas ya no eran de su nadador favorito, ya no había esa vibrante emoción por saber qué decían, qué canción sería. Solo insultos denigrantes y repetitivas, solo burla y humillantes palabras llenaban hojas y hojas. En ocasiones no se molestaba ni en abrirlas, botándolas tal y como las encontraba cada mañana, receso y hora de salida.

Las pocas veces que Yoongi intentó buscar algo de su novio en la escuela, desesperado por sentirlo cerca, terminaba en aquella habitación llena de polvo que Jimin le había mostrado. De nada sirvió, solo aumentó el dolor en su pecho y la sensación de vacío. De ser inútil para la persona que amaba.

🍃Bliss🍃《Omegaverse-Jimsu》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora