🍃Bliss🍃《Omegaverse-Jimsu》

♤Epílogo♤

🐾🐾

Jimin miró las luces del amanecer lluvioso a través de la ventana y su mente solo pudo pensar en cómo se vería ese reflejo celeste desvaído sobre los rasgos de su omega, la forma en que sus pestañas proyectarían pequeñas sombras bajo sus ojos, o la forma en que sus labios sonrojados se verían más brillantes. La forma en que la piel pálida de Yoongi resaltaba bajo cualquier resplandor...

Yoongi...

Yoongi...

Mi Yoongi...

Se lamentó el alfa, quien iba sentado como copiloto del automóvil.

-Encontraremos a tu madre en la desviación hacia la carretera. No pasaremos por la ciudad, nos iremos directo por la periferia. -le dijo quien iba a su lado.

-Está bien. -le contestó Jimin, dejando caer la cabeza sobre el asiento.

Hubo silencio, uno donde el alfa se esforzaba por dejar de pensar en que a cada segundo en que el automóvil avanzaba sobre el asfalto mojado, él se alejaba cada vez más de su omega recién marcado.

Mi omega, mi gatito...

Justo después de hacer el amor por quinta vez, Yoongi se había reído con los ojos cerrados y le había besado con pereza.

-Hay que dormir, Jimin-ah, ya no puedo más, me quedé sin...reservas -le había dicho sin energías. A lo que Jimin le respondió abrasándole y besándole en la nariz, ni siquiera le alcanzó a responder cuando su omega había caído rendido, con una sonrisita dibujada en los labios, se durmió profundamente en brazos de su alfa, sintiéndose seguro, cobijado y amado, muy amado.

Jimin había sonreído, y se acomodó para poder mirar a Yoongi dormir, pues él no quería cerrar los ojos y dejar el tiempo correr. Le abrigó con la colcha, antes de comenzar a acariciarle el rostro, el cabello, besar suavemente sus hombros descubiertos. De tomar sus manos y decirle mil veces "te amo", mientras su pareja descansaba. Le miró la marca y su alfa se sintió vivo, orgulloso, pero deprimido al mismo tiempo, pues sabía que debía partir de ese lugar que consideraba su único hogar.

Cuando Hyuk había llamado al móvil de Yoongi, a las cinco de la madrugada, Jimin supo que la hermosa fantasía en la que había estado viviendo, se había acabado.

"-Alguien irá por ti en una hora, Jiminnie. Necesito que estés listo para partir. Lleva solo lo necesario y debes dejar tu móvil apagado y pasárselo a quien vaya por ti, pues ahora mismo pueden estar intentando rastrearte. Quien vaya por ti, te entregará un móvil nuevo, procura empezar a usarlo una vez que estés en Daegu, no antes. Te amo mi cachorro, y nos mantendremos en contacto a través de terceros, está es la ultima vez que hablaremos, hasta que todo termine de una jodida vez. Con Yoongi también, dile que no le llamaré directamente, pues podría guiarlos a él." -le había dicho de una vez. Provocando que Jimin sintiera su corazón agrietado por saber que su mundo estaba cambiando sin elección. Que todo lo que estaba ocurriendo no era una pesadilla, por más que lo deseaba, pasa así poder despertar y saber que todo estaría bien.

-"Tío..."

-"Cuídate, Jimin. Te prometo que acabaré con todo, cuidaré a tu Yoongi y haré que el mundo sea bueno para ti otra vez." -le dijo para luego colgar, sin permitir que Jimin le contestara.

Después de aquella llamada, el alfa se había apresurado a revisar su móvil el cual estaba apagado. Cuando se volvió para ver a Yoongi, lo encontró acurrucado, durmiendo plácidamente, la sonrisita seguía en sus labios, el color teñía tenuemente sus mejillas y la paz que irradiaba era tal, que le hacían sentir bien de solo verle; y entonces Jimin supo que no podría despertarle para despedirse o simplemente no podría irse; su alma se sentía destruida de solo pensar la tristeza que mostrarían los ojos de su Yoongi.