♤ Treinta y seis ♤

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Dedicado a namjini💙

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Sin prisas; irrumpiendo en una mañana clara y fría. Sus manos unidas reunían el calor suficiente para mantener sus corazones tranquilos.

No hablaban, solo se miraban.

Pasos letárgicos que sosegaban el corazón inseguro del omega. Con cada avance, se sabia querido; con cada avance sabía que le quería.

Al llegar a la casa de los Park, Yoongi se apresuró a poner a hervir agua, en tanto servía arroz en pequeñas cantidades. Jimin se concentró en alimentar a Holly y llevarlo por breves diez minutos hasta la calle, esperando pacientemente en medio del frio que el animal hiciera sus necesidades.

Cuando el alfa ingresó al hogar se encontró con Yoongi calzando la camiseta amarilla, le esperaba con el desayuno.

-Ven Jiminnie, te serví un supresor en té. -Habló el omega desde la mesa, donde estaba preparándose leche con té de canela. El menor se desabrigó rápidamente y avanzó hasta la mesa. Yoongi le tendió una mano y plantó un beso en ella, sorprendiendo a Jimin, quien acababa de sentarse -Gracias de nuevo por acompañarme a mi trabajo...tu tienes entrenamiento a las nueve y treinta y aun así, estuviste conmigo toda la noche.

-Lo haría mil veces, si fuera necesario. -Jimin agregó un poco de miel al té supresor.

-No Jiminnie, esa fue la primera y ultima vez que lo haces. -el alfa detuvo sus movimientos para ver directamente a su novio -No quiero que por mi culpa tú bajes el rendimiento en la piscina. Sé que eres mi novio y me quieres, pero eso significa que como tú te preocupas por mí, yo lo hago por ti y...no soportaría ver que no estas al cien por ciento. Eres un deportista de alto nivel que mantiene una beca, no puedes permitírtelo.

Y tu padre te mataría...

Jimin frunció la boca, bajó los ojos y comenzó a revolver la miel de su té.

-Jimin...-Yoongi estiró la mano, no recibiendo respuesta del menor -oye no te enojes...

El alfa suspiró y alzó el rostro. Sus rasgos tallados en piedra hicieron al omega tragar grueso. El menor nunca había dirigido esa mirada tan tensa y molesta en su dirección.

-Yoongi aborrezco de sobremanera que tomen decisiones por mí, deberías saberlo. -la voz de Jimin era baja y ronca- si yo quiero estar contigo, si yo quiero acompañarte, es mi decisión y la habré tomado teniendo en cuenta todo lo que esta conlleva. -el mayor se sobresaltó ante la mirada dura y astuta del alfa -sé que tengo responsabilidades y no faltaré a ellas. Es más, Yoongi, tenerte a mi lado me da fuerzas que tu no entiendes...es...-Jimin sonrió y tomó la mano del mayor- Saber que he podido ayudarte, que he hecho de tu carga un poco más llevadera, me hacen sentir increíble. No importa si mi cuerpo esta algo fatigado, pensar en ti me pone bien. Ahora mismo soy capaz de cruzar cinco veces la piscina olímpica sin cansarme...

Yoongi no pudo rebatir ese argumento. Se limitó a alzarse de su lugar, llegar hasta el alfa y sentarse en su regazo. Jimin abrazó sus caderas. No hubo beso, pero si un abrazo muy apretado.

El tibio calor que mecía sus corazones les reconfortaba.

Al separarse, el omega le besó castamente en los labios.

-Termina el supresor y vamos a dormir, Jiminnie. -el alfa tocó brevemente las níveas piernas de su novio antes de que este se alzara y se sentara en su lugar, acabando con su té y el cuenco de arroz en tiempo récord.

🍃Bliss🍃《Omegaverse-Jimsu》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora