—¿Estás segura? —inquirió Gabriel para después voltear a ver en la misma dirección que su amiga.
—Por supuesto —contestó Lorena intentando normalizar su respiración—. ¿Cómo les fue ayer?
—Bien —contestó el chico de forma pensativa. Aparentemente no se había creído del todo la mentira de su amiga, pero parecía que no planeaba insistir más de momento—. Felipe cumplió su palabra. Solo me dio un mensaje de parte de Hermes. Marco estaba sobreactuando. Además, por lo que ambos comentaron, parece que Felipe no es tan malo.
Tras aquellas palabras por parte del joven Costa Lorena soltó un bufido con fuerza. No necesitó esforzarse para desterrar de su mente lo que había sucedido minutos atrás, pues aquella expresión por parte de su amigo bastó para ocupar toda su mente.
—¿No es malo? ¿Entonces por qué intentó matarnos el día que conocimos a Hermes? —interrogó la chica más retóricamente que otra cosa.
—Dije no "tan malo" —precisó el muchacho—. Sí, es un Carnero y entre las cosas que más desea está el regreso de los Neumas, pero es mejor que otros Carneros. Nunca ha atacado a Marco cuando este está desprevenido, no es de los que se dedican a espiarlo y aparentemente siempre cumple su palabra.
—¿Espían a Marco? —preguntó Lorena sorprendida.
No obstante, prontamente su sorpresa pasó. No parecía tan sorprendente cuando se ponía a pensar que la mayor parte de los Carneros que había conocido podían entrar perfectamente bien en el perfil de un acosador.
—Eso contó Felipe —contestó Gabriel rascándose la barbilla—. Lo cual me recuerda que tengo que preguntarle a Marco a que se referían con eso de Enrique.
—¿Enrique? ¿Qué dijeron de Enrique? —preguntó la muchacha con interés.
—No sé, algo de que un Carnero había quedado traumatizado cuando vio a Marco ebrio con Enrique —respondió el joven de aura azul mientras alzaba los ojos hacia un lado.
Con aquella información Lorena terminó frunciendo el ceño, al menos en un primer momento. Marco le había confesado que solía divertirse con Enrique cada vez que tomaban, aunque nunca había especificado de qué forma. El hecho de oír que un Carnero acabó traumatizado al ver aquello le dio un nuevo matiz a la confesión que había oído hacía un par de meses, lo cual hizo que la expresión de su rostro cambiara rápidamente por un sonrojo.
—¡Ay, no! —exclamó la chica intentando sacarse aquella imagen de la cabeza.
—¿Tú sabes algo? —le preguntó Gabriel frunciendo el entrecejo.
—No quieres saberlo —fue todo lo que respondió Lorena negando ligeramente con la cabeza.
—¿Por qué no? —inquirió el chico al mismo tiempo que ladeaba la cabeza.
—¡Gabriel! —exclamó en un tono de voz aliviado Adriana acercándose a ellos justo en ese momento—. ¡Me alegra ver que sigues vivo!
—Son una bola de exageradas —expresó el joven. Las palabras de Adriana habían logrado dispersar su atención sobre el tema que estaba platicando con Lorena—. Felipe dijo que solo quería darme un mensaje y eso fue todo lo que pasó.
—¿Sobre qué era el mensaje? —preguntó la joven Larios.
—Era una invitación por parte de Hermes para el ritual del Fuego Nuevo que realizan los Neumas cada año durante el solsticio de verano.
—¿Invitación? —inquirió la chica Oranday. Aquella noticia había logrado sacarle la imagen que se le había formado en la cabeza, pues inmediatamente estaba pensando en todas las implicaciones que podía tener lo que su amigo les estaba contando.

ESTÁS LEYENDO
Libro Amarillo
FantasySegunda parte de la serie Energía Áurica. Después de haber derrotado a Belial en Libro Rojo, Gabriel, Lorena, José Luis, Vanya, Adriana y Marco comienzan a creer que pueden retomar una vida normal; pero todo se complicará cuando nuevos enemigos que...