Rechazado.
Una, otra, y otra vez más. Más de cinco intentos para que lo escuchen y en ninguna si quiera voltearon a verlo. MinJi se reía disimuladamente tras él y JungKook sólo fruncía el ceño debido a la terquedad de los ejecutivos. Los conocía perfectamente y aunque JiMin tuviera el aura de un ángel y varios de esos hombres le habían dado miradas nada apropiadas y otros habían quedado embelesado por su belleza y sonrisa, no daban su brazo a torcer.
Sería difícil.
Pero JiMin no se rendía. Salía con la mirada caída mas fuera del salón se sonreía a sí mismo e iba a casa a seguir trabajando. Llamaba a TaeHyung para tomar fuerzas y conversaban en todo el camino. El castaño le repetía a cada rato cuánto lo extrañaba y también le contaba todo lo que pasaba con sus amigos. JiMin realmente los extrañaba y a veces deseaba sólo dejar todo y regresar al lugar donde sí se sentía seguro.
Pero no se rendiría.
Si hay algo que le habían enseñado era a que jamás debía bajar la cabeza. Los pocos años de experiencia que tenía no eran impedimento para él, pues desde el primer día que su padre lo presentó ante una junta de socios, tuvo la mirada levantada y eso nunca se le iba a olvidar. Ciertamente sus amigos y TaeHyung también le habían enseñado que a su imponente personalidad tenía que sacarle provecho, es por eso que siempre aludía a sus dotes de amabilidad y respeto.
Tenía algo que cambiaba a la gente.
Por las noches volvía a repasar el tema y preparaba miles de escenarios para que los días siguientes donde hubiese una junta de socios, se presentara y fuera escuchado. Y aunque, en ninguna de las anteriores fechas fue recibido gratamente, tenía la fe de que todo cambiaría siempre al día siguiente, sobretodo si contaba con la ayuda de JungKook y todo su experiencia en la empresa.
Leían con detenimiento.
Página tras página revisaban en qué podrían mejorar el esquema que JiMin tenía planeado. Se encontraban en una de las tantas oficinas de Jeon Company sin ser observados por nadie. Entre besos cortos y sonrisas tiernas, JungKook le explicaba a JiMin lo importante de saber la experiencia de cada uno de los ejecutivos. Uno a uno fue recitándole su largo currículum y su vasta experiencia laboral.
—Choi Ju Kyung —prosiguió JungKook—, es un grandísimo cabrón.
—¡Hey! ¿Por qué dices eso? —preguntó JiMin.
—Tiene demasiada experiencia y muchísimos estudios, pero le falta ética y moral —soltó con fastidio—. ¿Has visto como te mira el culo?
—Bueno, es que lo tengo bueno.
—¡JiMinnie! —exclamó exaltado—. Es un viejo pervertido y asqueroso ¡no puedo estar mirándote así!
—Tranquilo, dime más de él —susurró JiMin ahora con molestia mientras pensaba en lo malditos hombres enfermos que habían por ahí.
—Pues eso, tiene dos categoría superiores aquí —señaló en el documento—, pero si hay alguien que le gana definitivamente es Cha Ji Suk.
—¿El amigo de papá?
—Ese mismo. Es un hombre digno de admirar, no sólo profesionalmente, si no también como persona.
—Creo que sí —asintió JiMin recordando las palabras que aquel hombre le dijo hace unos días—, fue muy amable conmigo y también comprensivo. Me sentí como cuando papá hablaba y me aconsejaba, como si lo conociera de toda la vida.
—Por eso vendrá hoy —anunció el pelinegro rodeando la mesa y viendo el rostro sorprendido de JiMin—, llegará dentro de unos treinta y cinco munutos aproximadamente —prosiguió esta vez mirando su reloj—, así que debemos aprovechar ese tiempo Minnie...
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ʟᴀʙɪᴏꜱ ᴄᴏᴍᴘᴀʀᴛɪᴅᴏꜱ ➳ [ ᴋᴏᴏᴋᴍɪɴ ]
FanfictionPark JiMin y Park MinJi son dos hermanitos gemelos que se aman mucho. Su amor de hermanos parecía ser un lazo que nunca se rompería, hasta que a sus pequeñas vidas llega Jeon JungKook, un pequeño de cinco años que creará en los hermanos una gran ri...