Élite: Amor verdadero

21.- No lo vuelvas a tocar

-Papa, ¿Que haces aquí? Pensaba que llegaban hasta mañana dijo Carla.
Por favor Roberto, lleven a Samuel a mi habitación ordenó ella.

-¿Se puede saber que coño pasa Carla? Pregunto Theo a su hija.

-Samuel salió del hospital, ayer afuera de la casa le dieron una paliza, contestó Carla a su padre.

-¿Una paliza? Pregunto Theo desentendido.

-Si papá y probablemente el responsable fue Polo. ¿Verdad? ¿Tu no serías capaz tú de haberle hecho algo a Samuel? Pregunto Carla.

-¿Insinúas que yo fui el responsable de lo que le pasó a Samuel? Pregunto Theo ofendido.

-No se papá, honestamente ahorita ya no confío en nadie dijo ella.

-Mira Carla, lo que si sé es que Polo está muy molesto y yo no sé de qué pueda ser capaz ese chaval, no está bien y quiero que te alejes de él ¿me oíste? Le ordenaba su padre.

A Carla le desconcertó la actitud de su padre, antes le había molestado que ya no estuviera con él y ahora le pedía que se alejara.

-Venga papá, ¿Tú habéis hablado con Polo? Pregunto Carla.

-Si, antes de irme de viaje con tu madre fui a buscarlo y noto algo que no está bien con ese chaval, respondió el.

-Como sea papá, Samuel se quedará aquí en lo que se recupera y estoy segura que Polo tuvo algo que ver con lo que le pasó, dijo ella.

-Está bien Carla, no me opondré a que ese chaval esté aquí, pero de ninguna manera dormirá contigo en tu habitación, que le asignen una de huéspedes ordenaba Theo.

-Por Dios papá, si quiero hacer algo con Samuel me bastará solo dar unos pasos, mira quiero que se quede en mi habitación porque ahí lo podré cuidar mejor, aseguro Carla.

-Vale, a tu madre no le agradará nada esto pero está bien y espero que solo sean unos días, comentó Theo.

A Carla le dio gusto la aceptación de su padre, tal parecía que él ya estaba aceptando a su novio y de lo feliz que se encontraba por el cambio de actitud de su padre hasta un abrazo y un beso le planto.

-Gracias papá, te quiero dijo Carla.

A Theo le brillaron los ojos, pues su hija tenía mucho tiempo sin abrazarle y menos besarle.

Carla subió al cuarto y Samuel quien ya estaba instalado en su habitación y descansa en su cama.

-A tu padre no le gusta ni tantito mi presencia ¿verdad? Pregunto Samuel.

-Al principio no pero al final termino aceptando contestó Carla.
-En un momento más nos traerán la
comida, deberías dormir un momento dijo Carla.

-Vale pero con una condición, dijo el.

-¿Cual? Pregunto Carla.

-Que te acuestes aquí conmigo, dijo Samuel.

-Venga pero no quiero lastimarte, mejor me siento aquí por un lado y te cuido desde aquí, dijo Carla.

-No amor, por favor, ven aquí conmigo. Lo único que en estos momentos necesito es sentirte aquí, cerca de mi dijo Samuel.

Carla anhelaba hacerlo y Samuel no dejaba de insistir, tal parecía que el chico por fin le ganaría a la marquesita.

-Vale, pero por favor si te lastimo dímelo dijo Carla.

Se recostó junto a él y quedaron los viendo hacia el techo, Carla volteó a verlo y con si mano acariciaba suavemente su pecho.

-¿Te duele mucho? Pregunto ella.