Élite: Amor verdadero

61.- Nueva historia

8 años después.

Madrid, España.
Residencia Garcia Rosón...

-Venga Samuel, que ya es hora de dormir. Por favor arrulla a Leo para que ya se duerma—dijo Carla con voz suave, mientras se acercaba a la cama para acostarse.

Samuel estaba perdido en la mirada del pequeño Leo y lo oía balbucear con atención.

-Anda amor, déjame contarle una pequeña historia a nuestro niño—pidió Samuel insistente. Ve esos ojitos, no tiene sueño y se ve que quiere una buena historia para antes de dormir—insistía el joven padre sin perder de vista a su hijo.

Carla ya estaba recostada por un lado de los dos, mientras cogio un libro para leerlo.

Samuel tenía al pequeño Leonardo de dos años encima de su estómago, siempre antes de dormir jugaba con él y se dedicaban un tiempo de padre e hijo, a pesar de las múltiples ocupaciones de el joven padre, él siempre se daba el tiempo de convivir con sus hijos.

Ese niño es la adoración de todos, logró conquistarlos con sus hermosos ojos verdes, igual a los de su madre pero con mirada tierna de Samuel, tenía su cabello rubio que brillaba tanto o más que el sol, igual al de Carla y esa sonrisa encantadora de su padre.

-Vale, ¿Y que historia vas a contarle? Preguntaba Carla curiosa, sin perder de vista su libro.

-Podría ser... dijo Samuel mientras llevaba una de sus manos a la barbilla simulando que pensaba.

Después de varios minutos Samuel, por fin encontró la historia perfecta para contarle a su pequeño Leonardo.

-Ya se que historia te voy a contar mi niño—aseguraba Samuel.

Carla cerró su libro y volteó a mirarlos con una adoración inexplicable. El ver a Samuel tan emocionado con su niño. Sin duda alguna se sentía la mujer más afortunada por tener a tales hombres a su lado.

-Esta historia es de tu mamá y mía y te aseguro te enseñará mucho, así como la vida nos enseñó a nosotros. Porque aquí como nos ves ahorita de felices, a tu hermosa madre y a mi nos pasó de todo, pero a pesar de eso estamos muy agradecidos, ya que todo eso nos enseñó a apreciar las cosas bonitas de la vida, nos hizo madurar y sobre todo nos hizo ver que nuestro amor es más grande que cualquier cosa—decía Samuel.

Carla solo miraba con ojos de amor y ternura a su esposo.

-Vale, está bien cuéntale la historia, pero sin hacer mucho ruido, no quiero que vayas a despertar a Isabella-Dijo Carla, refiriéndose a la hija más pequeña de nueve meses que dormía a pocos metros de ellos.

Isabella tenía los ojos marrones de su padre y color de cabello igual al de él, pero sin duda tenía la sonrisa sincera de su madre. La pequeña Isabella junto con Leonardo eran los consentidos de los Rosón Caleruega y de los Garcia.

-Samuel solo asintió, te prometo que seré muy silencioso–contestó —Y bueno, empezare ya porque la historia está algo larga mi pequeño y tu madre quiere que que ya duermas—dijo Samuel mientras él pequeño Leo le miraba atento, como si supusiese realmente de lo que su padre le hablaba.

-Empezamos...

Por una estupidez mía borre amor verdadero: siempre tú. 😢 Para buena fortuna tengo copia de cada capítulo, los volveré a subir pero ya no haré una obra nueva, los subiré aquí, ya lo analice mejor y la segunda parte no será muy larga, así que mejor la subo aquí y disculpen el relajo que traigo fue un error mío. 😘